MADRID, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado de Iberia, Ángel Mullor, formalizó hoy ante la Comisión de Nombramientos y Retribuciones del grupo su decisión de renunciar al cargo y abandonar la compañía tras diez años en la alta dirección de la aerolínea de bandera. La salida de Mullor refuerza sustancialmente la posición del presidente de la aerolínea, Fernando Conte, que asumirá todas las funciones ejecutivas.
Los poderes ejecutivos en el seno de Iberia recaían hasta ahora casi enteramente en las manos de Mullor, unas funciones que serán trasladadas con carácter inmediato al conjunto de responsabilidades que controla el presidente de la compañía, quien, no obstante, ha participado muy directamente en la gestión diaria de la aerolínea desde la asunción de su cargo, en el año 2003.
El consejo de administración de Iberia, que tomará conocimiento formal de la dimisión de Mullor en su reunión del próximo lunes, desestimará reeditar el actual modelo de bicefalia al frente de la compañía y apostará por ceder todo el poder a Conte. Pese a que la salida efectiva de Mullor de la compañía no se producirá hasta la próxima junta de accionistas, prevista para el 30 de mayo, el presidente asumirá de facto sus nuevas funciones de manera inmediata.
La dimisión de Mullor está motivada por "razones personales" y su "interés en acometer nuevos proyectos personales y profesionales", según explicó la aerolínea en un comunicado. Fuentes del sector apuntan, sin embargo, que las razones de la salida se sitúan fundamentalmente en supuestos desencuentros con el consejo de administración en torno al diseño del Plan Director 2006/08 y a proyectos como el lanzamiento de una aerolínea de bajo coste. Unos desencuentros que Iberia y los accionistas de su núcleo duro --British Airways, Caja Madrid, BBVA y Logista-- niegan oficialmente.
UNA TRANSICIÓN DE TRES AÑOS.
Mullor se incorporó a Iberia en 1996, de la mano de Xabier de Irala --hoy presidente de la caja de ahorros de Vizcaya, BBK--, para conducir la privatización de la compañía aérea. El relevo de De Irala por Conte, en mayo de 2003, abría un periodo de "transición" en el que se mantendría una bicefalia con Mullor como consejero delegado que, según sus propios planes, en principio habría de durar tan sólo seis meses.
Seis meses que finalmente se han alargado hasta completar tres años de tándem Conte-Mullor. En la década en que Ángel Mullor ha estado en Iberia, primero como director general (1996-2001) y luego como consejero delegado (2001-2006), la compañía ha culminado tres planes directores y, desde sus cargos de responsabilidad, ha contribuido a la transformación de Iberia: privatización, entrada de Oneworld y renovación de la flota, entre otras facetas.
"Llevo diez años en Iberia, mucho más tiempo del que imaginaba cuando llegué para acometer la privatización de la compañía. Me voy con la satisfacción de haber trabajado con un equipo humano de primera categoría y de haber cumplido todos los objetivos que nos hemos ido marcando en los tres planes directores que hemos aplicado en este tiempo", explicó Mullor en un comunicado.
Fernando Conte expresó su agradecimiento a Mullor por su "gran aportación" a la transformación de la empresa. "Muy especialmente, el apoyo recibido desde que en 2003 ne incorporé a la presidencia de la compañía, aunque entiendo los deseos de Ángel Mullor tras diez largos e intensos años en la empresa", indicó Conte.
