Sánchez-Galán dijo coincidir con el espíritu de las medidas para el sector eléctrico anunciadas por Montilla
MADRID, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, afirmó hoy que las condiciones impuestas por el Gobierno a Gas Natural para llevar a cabo la oferta pública de adquisición (OPA) lanzada sobre Endesa "encajan" en su acuerdo con la gasista, por el que le comprará activos resultantes de la operación.
Galán afirmó en la rueda de prensa de presentación de los resultados de 2005 que este acuerdo permanece igual que cuando fue suscrito en septiembre y que las condiciones que el Gobierno ha impuesto a la gasista "no plantean limitaciones" a la ejecución del mismo.
Por su parte, Jose Luís del Valle, director de desarrollo estratégico de la eléctrica, reafirmó que el acuerdo con la gasista es "firme y vinculante para ambas partes", aunque sujeto a que se lleve a cabo efectivamente la OPA, a que Iberdrola sea autorizada a hacerse con esos activos teniendo en cuenta cuestiones de competencia, y a que terceros agentes afectados la autoricen.
En la primera comparecencia pública de los responsables de Iberdrola tras la aprobación de la OPA se mencionaron varias de las condiciones impuestas a Gas Natural, como la obligación de deshacerse de 1,5 millones de puntos de suministro de gas, cosa que en la que el acuerdo "sigue encajando perfectamente", según del Valle.
El único punto que permanece oscuro de este acuerdo es el precio exacto que Iberdrola deberá pagar por esos activos aunque se sabe que oscilará entre 7.000 y 9.000 millones de euros. La valoración de estos activos comenzará en el momento en que se ejecute la OPA.
El consejero delegado explicó los pormenores de cómo se llevará a cabo esta valoración, que se realizará a través de dos entidades financieras. Aun así dijo que "el precio será objetivo y razonable".
Para sufragar esta compra, la eléctrica tiene planeado endeudarse en un 50% y llevar a cabo una ampliación de capital en otro 50%, "tal vez la mayor de España", subrayó Sánchez-Galán.
El primer ejecutivo de Iberdrola explicó que de esta manera se "garantiza la solidez del grupo", y manifestó ser consciente del riesgo que supone no saber el precio, aunque reiteró su compromiso de cumplir el pacto.
Tras hacerse con estos activos, Iberdrola cree que "mejorará la estructura de la actividad regulada", la competencia en la generación eléctrica, que se garantizarán las inversiones y que se asegurará el mejor precio de mercado para esos activos.
Por ello creen que "la operación será beneficiosa para los consumidores, al mejorar la competencia y garantizar las inversiones en nuevas centrales de generación como en redes de distribución.
Del Valle explicó también que la compraventa de activos debe ser autorizados por la Comisión Nacional de la Energía (CNE), y que pidió que la operación se considere "como una sola operación".
Recordó que debe ser notificada a las autoridades de Bruselas, ya que un tercio de estos activos de producción se encuentra en Europa, en concreto en Italia y Francia. En este sentido, del Valle estimó que Iberdrola "no se plantea ningún problema de competencia" en ninguno de estos países.
NUEVAS MEDIDAS EN EL MERCADO ELECTRICO.
Por otro lado, el consejero delegado de la eléctrica afirmó que las nuevas medidas anunciadas por el Gobierno para reducir las distrosiones en el mercado mayorista de la electricidad son medidas estrictamente de mercado y que traerán "más competencia, más mercado, más liberalización y menos tarifas subvencionadas".
En este sentido manifestó que Iberdrola "coincide" con el espíritu de dichas medidas, que tienen como objetivo evitar que una compañía domine el mercado o que se produzcan distorsiones en el precio de la electricidad en los mercados mayoristas.
Sánchez-Galán dijo que su compañía hace caso de las indicaciones gubernamentales, por eso apostó en su día por las energías renovables y las plantas de ciclo combinado, porque el Gobierno lo recomendó, por eso no descartó que en el futuro puedan invertir en energía nuclear.
"Las políticas energéticas de un país las marcan los gobiernos y no las empresas, y nosotros somos una compañía disciplinada y seguimos las directrices del Gobierno", afirmó.
Además, insistió en la conveniencia de poner en marcha los llamados contratos a plazo, que no existen en España por "deficiencias egulatorias". "Creemos en los mercados a plazo y que pueden ser una magnífica solución".
