LISBOA, 3 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
El grupo portugués Ibersol anunció hoy que prevé centrar su estrategia de crecimiento en el mercado español a través de compras, a pesar de que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) rechazara recientemente su Oferta Pública de Adquisición de acciones (OPA) sobre Telepizza.
Según su informe de cuentas de 2005, Ibersol aspira a convertirse en la mayor empresa lusa del sector de la restauración multimarca que opere en España, donde también prevé intensificar sus negocios como fórmula de compensar los efectos del consumo en Portugal sobre sus ventas.
"Pretendemos ser el mayor operador portugués del sector de la restauración multimarca y asumir una presencia creciente en el mercado español, donde intentaremos intervenir activamente, tanto a través de la implantación de nuevas unidades, como a través de la adquisición de nuevos negocios", dice el informe.
Ibersol, que obtuvo un beneficio de 9,2 millones de euros en 2005, lo que supuso un 10% más que el año anterior, explicó que "la dimensión alcanzada por los negocios localizados en España constituye una plataforma adecuada para integrar otras operaciones". Además, aventura que "la evolución del consumo en Portugal seguirá afectando a las ventas".
Ibersol dio el primer paso de su estrategia de adquisiciones el pasado 22 de abril, cuando solicitó permiso a la CNMV para lanzar una OPA a través de su filial española (Vidisco) sobre Telepizza a razón de 2,25 euros por acción, 10 céntimos más que la primera oferta formulada por el grupo Carbal (vinculado a la familia Ballvé) y los fondos de capital riesgo Permira.
El organismo supervisor de los mercados que preside Manuel Conthe rechazó su propuesta por considerar que no se ajustaba a la regulación vigente, al ofrecer un valor inferior al de la segunda oferta sobre la cadena de comida rápida, la del grupo Zena, que ofrece 2,40 euros por unidad.
Ante el rechazo de la CNMV, la empresa portuguesa argumentó que el precio ofrecido por Vidisco tuvo en consideración la primera y única propuesta sobre Telepizza autorizada por el organismo supervisor español, y que se reserva "el derecho a defender sus legítimos derechos e intereses de la forma que considere más apropiada".
