TALAYUELA (CÁCERES), 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los productores de tabaco asentados en el norte de Cáceres no consideran que la ley que restringe el consumo de esta sustancia, que entró en vigor ayer, afecte a su economía a corto plazo, aunque admiten que la industria tabaquera se resentiría si las compras de cajetillas descendieran a medio y largo plazo.
Así lo confirmó a Europa Press el gerente de la cooperativa tabaquera 'La Unión' de Talayuela (Cáceres), José María Ramos, que manifestó que la entrada de la ley les "preocupa" porque les afectará de una manera "colateral, no directamente como piensan algunos, a aunque va a afectar a la industria tabaquera y a los productores, porque formamos parte de este mundo".
Ramos opinó que la entrada en vigor de la ley "a corto plazo no va a afectar a la producción, nos afecta mucho más la entrada en vigor de la nueva Organización Común de Mercado (OCM)". Así, señaló que la restricción de consumo de tabaco sí podría perjudicar a la producción. En este sentido dijo que "a medio y largo plazo si disminuye el consumo del tabaco, evidentemente también disminuirá la producción, lo que pasa es que para entonces quizá no estemos aquí, la OCM habrá acabado con nosotros antes que la ley antitabaco".
El gerente de la compañía tabaquera apuntó que la ley influirá en las ventas ya que, comentó, "los que hacen los cigarrillos los grandes perjudicados, junto a los del Ministerio de Economía y Hacienda, porque de cada cajetilla el 80% se lo queda el estado".
A este respecto, no dudo en señalar que "todos vamos a perder, pero el que más va a perder va a ser el estado y de algún lado lo tendrán que recuperar, ese no será nuestro problema".
Pero la gran preocupación de los productores de tabaco es la aplicación de la OCM del tabaco que "es suficientemente grave para hacerle daño al tabaco y si a eso le sumas la ley, lo que hace es aumentar el daño". No obstante advirtió de que "aunque dejemos de producir se va a seguir consumiendo tabaco. Va a venir tabaco de fuera".
Uno de los agricultores de Talayuela que produce tabaco, Antonio Aceituno, afirmó que la nueva ley "es un palo más al tabaco, pero permite fumar, la ley de Bruselas no permite producir". Asimismo, señaló que esta ley "no viene bien a nadie, pero nuestra mayor preocupación es la OCM".
"Ahora mismo no tengo futuro, no sé que voy a hacer. Yo cultivo, antes los hizo mi padre y antes mi abuelo. Hemos plantado otros cultivos, pero las parcelas son muy pequeñas y no es rentable.
Sufrimos un acoso sin soluciones y se están cargando nuestro futuro".
Por su parte, Fernando Herreruela, técnico de Ibertabaco, una agrupación de productores de la zona, expresó que la nueva ley "viene a enturbiar el sector, que ya está en el punto de mira de la sociedad. Viene a perjudicar a un sector que forma parte de la agricultura".
En su opinión en la aplicación de esta ley "se mezclan conceptos como el consumo, la sanidad y la producción y eso enturbia las cosas" por lo que indicó que ante los productores se abre un "futuro difícil, porque hay que tener en cuenta que tenemos que producir en condiciones de desigualdad frente a los competidores".
Por último, apuntó que los agricultores cacereños "van a perder dinero con OCM, y la ley es un puntito más que viene a desfavorecernos". De todos modos, Herreruela consideró que "el hecho de que deje de producirse tabaco no quiere decir que deje de consumirse, el consumo se va incrementando año tras año. Lo que vamos a conseguir es que tengamos que importar si no hay producción".
