BRUSELAS 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
Estados Unidos pidió hoy a la Unión Europea (UE) que no reimponga las sanciones que dictó por primera vez en marzo de 2004 por las exenciones fiscales que este país concede a sus empresas exportadoras, y cuya ilegalidad confirmó ayer la Organización Mundial del Comercio (OMC) ya que Washington considera que "no servirá para impulsar unas relaciones trasatlánticas armoniosas".
La oficina de Comercio estadounidense emitió este martes un comunicado en el que consideró que la prolongación del conflicto comercial por la ley norteamericana Foreing Sales Corporation (FSC) no beneficiará a las relaciones bilaterales, teniendo en cuenta que "las provisiones transitorias expiran al final de este año y que los beneficios que originan las provisiones de apadrinamiento serán extremadamente pequeños".
Los periodos transitorios y las cláusulas de apadrinamiento fueron objeto del fallo que emitió la OMC la víspera, en el que rechazaba el recurso que presentó Estados Unidos contra resoluciones anteriores en las que el organismo comercial aseguró que ni la Foreing Sales Corporation (FSC) ni la ley que le sucedió cumplían las reglas internacionales. La UE reaccionó al último fallo, ayer, diciendo que Washigton dispone de dos meses para retirarlas antes de que Bruselas reestrablezca las sanciones comerciales, que pueden alcanzar un valor máximo de cuatro millones de dólares anuales.
Se trata de leyes en virtud de las cuales Estados Unidos otorga exenciones fiscales a sus empresas exportadoras y que la UE, y otros países como Australia, que también presentó una queja ante la OMC, consideran una práctica comercial desleal.
Una vez que la FSC fue declarada ilegal, el Congreso estadounidense la sustituyó por otra que, sin embargo, mantenía un periodo de transición para dejar de ofrecer estos beneficios fiscales a finales de 2006.
Por otra parte, se fijaban las denominadas "cláusulas de apadrinamiento", que prevé que la abrogación de la FSC no se aplicará a ninguna transacción que ocurra en virtud de un contrato vinculado firmado antes de septiembre de 2003, dando la posibilidad además de que este contrato fuera renovado o reemplazado. A esta disposición pueden acogerse compañías estadounidenses como General Motors, Micrososft y Boeing, la compañía aeronáutica por la que la UE mantiene un litigio paralelo con Estados Unidos en la OMC.
En su fallo de ayer, la OMC confirmó la ilegalidad de estas provisiones legales, una sentencia a la que reaccionó la UE recordando que Washington dispone ahora de 60 días para acomodar su legislación a las obligaciones de la OMC si quiere evitar que Bruselas imponga las "medidas de represalia" que decretó en marzo de 2004 y retiró en enero de 2005 en vista de que Washington se había comprometido a reformar la ley FSC con una norma que posteriormente también fue declarada ilegal por la OMC.
Se trata de unas sanciones cuya imposición autorizó la OMC por valor de cuatro millones de dólares anuales a las exportaciones estadounidenses y que Bruselas aplicó a empresas de los sectores agrícola, textil, electrónica o papel, entre otros, y que hoy Estados Unidos pidió que no se reimpongan.