Economía/Macro.- El IPC de Estados Unidos aumenta un 0,7% en enero, hasta el 3,4% interanual

Actualizado: miércoles, 22 febrero 2006 17:31

Los precios de la energía registran el mayor encarecimiento desde septiembre


WASHINGTON, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Índice de Precios de Consumo (IPC) en Estados Unidos aumentó en enero un 0,7%, el mayor ritmo en los últimos cuatro meses, con lo que la inflación interanual se sitúa en el 3,4%, anunció hoy el Departamento de Trabajo norteamericano.

La gasolina y la electricidad fueron las dos rúbricas con mayor encarecimiento, lo que genera nuevas incertidumbres en torno a la próxima decisión de la Reserva Federal (Fed) sobre tipos de interés, ya que el banco central ha insistido en los precios del petróleo y de la energía como uno de los aspectos más influyentes para su política monetaria.

Del encarecimiento del enero, alrededor del 70% provino de la energía. Excluidos estos productos y los de la alimentación, la inflación subyacente hubiera sido del 0,2%, en la línea de las previsiones del propio Gobierno estadounidense.

En enero, los precios de la energía se encarecieron un 5,7%, y un 4,2% en el caso de los servicios energéticos, mientras que los alimentos mostraron mayor contención al registrar un incremento del 0,5%. No obstante, este aumento es cuatro décimas superior al de diciembre.

Uno de los aspectos que preocupan a las autoridades estadounidenses son los efectos de segundo orden de los altos precios del crudo, esto es, que este encarecimiento se traslade a otras rúbricas relacionadas con el consumo. En esta ocasión, los alimentos frescos y los vegetales se encarecieron en enero un 0,5%, mientras que los precios de los vehículos aumentaron ligeramente.

FUERTE AUMENTO DE LA ENERGÍA.

El aumento de los precios de la energía en enero es el mayor desde el 11,8% de septiembre, tras el paso del huracán 'Katrina'. Dentro de los productos energéticos, la gasolina cuesta un 6,4% más, mientras que la electricidad, en contra de las previsiones, se encareció un 5,5%, el mayor ritmo en un solo mes en los últimos 54 años.

Otro de los aumentos más significativos fue el de los vehículos nuevos de motor, del 0,6%, lo que supone el mayor avance en un año, mientras que los billetes aéreos se encarecieron un 1,2%, el mayor avance desde octubre.

Los precios de los productos médicos, que generalmente tienen una influencia notoria en el conjunto del IPC, aumentaron un 0,1%, una de las subidas más moderadas de los últimos meses.

El resultado de la inflación en enero fue superior al previsto por los analistas, que esperaba un 0,5%, y conlleva el mayor aumento de precios desde septiembre, cuando el IPC aumentó un 1,2% en solo un mes.

POSIBLES SUBIDAS.

La Fed ha subido los tipos de interés en un cuarto de punto en catorce ocasiones desde junio de 2004, en un esfuerzo por controlar los precios en un momento de fuerte crecimiento, y es posible que los nuevos datos de inflación contribuyan a nuevas subidas de tipos.

Los analistas esperan que Bernanke aplique una política continuista en los primeros meses, y promueva subidas de tipos en marzo y en mayo, tras lo que podría mantener el precio del dinero hasta finales de año.

Por otro lado, el crudo se abarataba hoy en los principales mercados internacionales. En el Nymex de Nueva York, el barril de Texas se cambiaba a 62,01 dólares, 73 centavos menos, mientras que el Brent de Mar del Norte costaba 61,05 dólares, 55 centavos menos.

El dólar se fortalecía hoy frente al euro. Un euro se cambiaba a 1,1873, frente a los 1,1917 dólares de ayer, mientras que la libra seguía una tendencia parecida, al pasar de 1,7460 dólares ayer a 1,7400 dólares hoy.

El Producto Interior Bruto (PIB) del país aumentó un 3,5% en 2005, siete décimas menos que en 2004, después de que la economía creciera en el cuarto trimestre un 1,1%, el ritmo más lento en los últimos tres años.

En el conjunto del año, la ralentización con respecto al año anterior se debió a un descenso en la inversión, en el gasto del consumidor y en la inversión pública. En el cuarto trimestre, se produjo una desaceleración en el gasto del consumidor y un fuerte descenso en algunos sectores clave, como la compra de vehículos de motor.