Las minorías de izquierda critican que la propuesta es demasiado "imprecisa" y busca sólo "una foto"
MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Partido Popular y el PSOE han conseguido este martes sumar a sus votos los de CiU y el PNV para pedir a la Unión Europea que haga uso de todos los instrumentos de que dispone para estimular el crecimiento económico en el país, una iniciativa que se produce apenas una semana después del anuncio de una inyección de 130.000 millones de euros con este objetivo que se produjo en la Minicumbre de Roma.
Socialistas y 'populares' acordaron la semana pasada instar al Gobierno a promover un impulso al crecimiento económico a cambio de votar conjuntamente la ratificación del Pacto Fiscal Europeo, en el que el PSOE pretendía incluir una cláusula en este sentido.
Así, la iniciativa que se ha debatido en el Pleno del Congreso --y para la que no se ha aceptado ninguna enmienda-- pide al Ejecutivo que promueva, en el marco de la UE, el uso de "todos los instrumentos a su alcance" para impulsar el crecimiento y para fomentar la creación de empleo, en particular entre el colectivo juvenil, para el que piden un plan de emergencia.
Además, se reclama a la UE el establecimiento de "las bases para una Estrategia Europea de Inversiones" que, mediante el uso de los 'bonos de proyecto', movilice recursos públicos y privados en proyectos de determinados sectores estratégicos para toda la Unión; así como desarrollar una política impositiva que apueste por la armonización fiscal y la lucha contra el fraude, y que genere un nuevo impuesto sobre las transacciones financieras para respaldar estas iniciativas de crecimiento.
El objetivo último al que apunta la iniciativa es lograr una unión bancaria con una "regulación común, un fondo de garantía europeo, un supervisor europeo y un mecanismo europeo de resolución de crisis bancarias".
PROPUESTA DE MÍNIMOS
El diputado socialista Juan Moscoso ha reconocido que la proposición es "de mínimos" y que deja fuera otras ideas aportadas por el PSOE y que algunos grupos parlamentarios proponen mediante enmiendas para poder acordar con el PP. "Nos hubiera gustado ampliar más, pero hasta aquí hemos llegado", ha dicho, defendiendo no obstante que la iniciativa es suficiente para "ayudar a consolidar el giro del Gobierno de España hacia las políticas de crecimiento".
Un cambio de actitud que ha achacado a la victoria de François Hollande en las elecciones presidenciales francesas y que, en el caso español, es "incipiente" y debe "consolidarse con propuestas concretas de apuesta por el crecimiento", por lo que ha reclamado un "plan de actuación" concreto para el país. Así, el diputado ha advertido de que "no puede haber estabilidad ni confianza sin crecimiento, y el pago de la deuda pública será insostenible" si la economía no remonta.
Por su parte, la presidenta de la Comisión de Economía del Congreso, la 'popular' Elvira Rodríguez, ha negado el "enfrentamiento" entre austeridad y crecimiento, al menos cuando las políticas de estímulo causan "efectos contrarios a lo pretendido", y ha abogado por la necesidad de que "la estabilidad a corto plazo no ponga en riesgo la de largo plazo, que es la que garantiza la prestación de servicios públicos imprescindibles".
"En esto están las principales diferencias de criterio: con unas cuentas muy desequilibradas no basta con apostar por políticas de gasto del crecimiento o por políticas de ingresos nuevos. Hay que recuperar la confianza", ha dicho, señalando que está "muy deteriorada" por los "incumplimientos" en materia de estabilidad presupuestaria.
LOS NACIONALISTAS APOYAN PERO CRITICAN QUE NO SE CUENTE CON ELLOS
El portavoz de CiU en materia económica, Josep Sánchez Llibre, se ha congratulado del acuerdo entre PP y PSOE pero ha deseado que se produjera también "en temas verdaderamente importantes y trascendentes" y no sólo en proposiciones que "no dejan de ser fuegos artificiales que muchas veces quedan en nada".
Además, ha criticado que se haya dejado fuera a formaciones que, como CiU, han demostrado su sentido de estado en momentos "clave y difíciles" y ha lamentado que no se haya aprovechado para reclamar herramientas como los eurobonos. En cualquier caso, ha anunciado el voto a favor de los nacionalistas catalanes.
Su homólogo del PNV, Pedro Azpiazu, también ha anunciado el voto favorable de su grupo aunque ha pedido "hacer más" y "abandonar la ambigüedad" que a su juicio puebla la iniciativa. "Llamemos a las cosas por su nombre. Queremos que se concreten los protagonistas de las políticas económicos que se implanten desde la UE. De lo contrario podemos caer en el ridículo de que hasta la propia Angela Merkel vaya más lejos de lo que se proponer en esta proposición. Seamos un poco valientes", ha pedido.
Además, ha aprovechado para criticar a socialistas y 'populares' que no hayan "invitado a participar" en las negociaciones a los nacionalistas vascos. "Da la sensación de que están pretendiendo descubrir el Mediterráneo: el PP es el partido de la austeridad y el PSOE, el del crecimiento. Los demás en esta cuestión debemos estar ausentes. Pero no se equivoquen: estas ideas de que la UE potencie el crecimiento no son un debate novedoso ni un tema de ponerse medallas", ha dicho.
FALTA APOSTAR POR LA COHESIÓN SOCIAL
Por su parte, la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) votará en contra de la proposición. Su portavoz económico, Alberto Garzón, ha criticado que se trata de una iniciativa "tan de mínimos, tan vacía, vaporosa, profundamente confusa y sin propuestas precisas" que da la impresión de que sólo busca que PP y PSOE puedan "hacerse la foto".
"Parecería que se han puesto de acuerdo en las causas de lo que ha sucedido, pero dada la imprecisión no se puede estar seguro, y escuchando a los dos portavoces uno se da cuenta de que hay notables divergencias en las palabras. De hecho, luego votaremos una moción del PSOE que se enfrenta radicalmente toda la política económica del PP. El texto es tan de mínimos que no dice verdaderamente nada", ha dicho.
En este sentido, el diputado echa en falta alusiones al carácter democrático que debe primar en toda la arquitectura comunitaria y también al diseño político y económico de la UE que, a su juicio, "no tiene futuro si es profundamente desequilibrada económica, política y socialmente", aspectos que tampoco se abordan en la iniciativa.
También Francisco Jorquera, del BNG, ha criticado que PP y PSOE buscan sólo "poner una guinda" a la reforma "exprés de la Constitución" y a la "fe ciega en la disciplina presupuestaria como principal vía para salir de la crisis", y ha abogado por cambiar esa política.
En la misma línea, Teresa Jordà, de ERC, ha apuntado que si se va a apostar por la armonización con Europa, no debe ser sólo económica, sino también "social", algo con lo que ha coincidido Rafael Larreina, de Amaiur, que ha subrayado las "contradicciones" entre las "buenas y bonitas palabras" que incluye la iniciativa y la realidad de "empobrecimiento" de la población.
