PARIS 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
El grupo automovilístico francés PSA Peugeot-Citroën obtuvo el pasado año un beneficio neto de 1.029 millones de euros, lo que supone una reducción del 37,5% respecto a las ganancias de 1.646 millones de euros registradas en 2004, informó hoy la compañía.
La multinacional gala justificó el descenso de sus ganancias por una serie de factores negativos, como la desfavorable evolución de los volúmenes de venta y producción en Europa, condicionada por incremento de la competencia y la generalización de las promociones en este mercado.
Además, el encarecimiento de las materias primas restó 340 millones a los resultados y los gastos para adaptar los vehículos a las nuevas normas Euro IV detrajeron otros 97 millones. El impacto técnico de las nuevas normas internacionales de contabilidad (NIC) también repercutió negativamente en los beneficios.
REDUCCION DE COSTES.
Estos factores anularon el efecto positivo de la reducción de los costes de producción, que aportó 614 millones de euros al resultado, y del tipo de cambio de divisas.
La cifra de negocio de la multinacional francesa se situó en 56.267 millones de euros en 2005, lo que representa un ligero aumento del 0,3% en comparación con el ejercicio precedente. La facturación de la división automovilística descendió un 0,4%, con 45.071 millones de euros.
El resultado operativo se situó en 1.940 millones de euros, con una caída del 19,7%, de forma que el margen operacional (beneficio operativo sobre facturación) bajó del 4,4% contabilizado en 2004 al 3,4% en 2005.
La compañía que preside Jean-Martin Folz vendió durante el pasado año en todo el mundo 3,39 millones de vehículos, un 0,4% más que en 2004, mientras que su producción mundial alcanzó 3,37 millones de unidades, con una disminución del 0,9% en relación con el ejercicio anterior.
PREVISIONES.
Para este año, PSA pronostica estabilidad en el mercado automovilístico europeo, donde se mantendrán las promociones. La empresa rejuvenecerá su gama de productos, con el lanzamiento en abril del Peugeot 207, y con el primer ejercicio completo de comercialización de los modelos Citroën C1 y C6, y Peugeot 107, 1007 y Cupé 407).
Gracias a estos modelos, el grupo espera reanudar la ofensiva comercial y recobrar el crecimiento de sus volúmenes en Europa, mientras que fuera de Europa occidental la empresa seguirá su dinámica de progresión gracias a los lanzamientos que llevará a cabo en Mercosur y China.
No obstante, PSA advirtió de que el alza de los precios de las materias primas y la segunda etapa de adecuación a las normas Euro IV, así como el ajuste técnico de las NIC, "pesarán en los resultados financieros del grupo", que en cualquier caso pretende seguir reduciendo sus costes de producción, aumentando la rentabilidad fuera de Europa y mejorando la aportación de las áreas no automovilísticas.
Teniendo en cuenta todos estos elementos, la compañía estima que su margen operativo se situará en el primer semestre de 2006 al mismo nivel que en el segundo semestre de 2005, en tanto que en el segundo semestre de este año se producirá un avance.