MADRID, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado de Asuntos Europeos, Alberto Navarro, afirmó esta mañana que la respuesta del Ejecutivo a la Comisión Europea sobre la modificación de las funciones de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) tras la OPA de la E.ON sobre Endesa estará "muy inspirada" en el contenido de la primera carta que se envió ya a Bruselas cuando la institución europea reclamó información sobre este caso.
"Creo que estará muy inspirada en lo que fue ya la respuesta que dimos a la carta de información que nos mandó la Comisión Europea antes del procedimiento de infracción", señaló Navarro tras intervenir en un seminario sobre los límites de Europa en la Universidad San Pablo CEU.
El secretario de Estado recordó que el Ejecutivo ya contestó inicialmente con una carta "muy amplia", por lo que en esta ocasión se hará una respuesta "más trabajada" en el plazo de dos meses que tiene para hacerlo.
Asimismo, subrayó que la contestación se preparará "en estrecha coordinación" entre los Ministerios de Exteriores, de Industria y de Economía, así como con la oficina económica de Presidencia del Gobierno y la Abogacía del Estado.
Por otro lado, Navarro respondió a la última negativa de la Mesa del Parlamento Europeo de acceder al uso de las lenguas cooficiales en esta institución. "Sigo considerando que estamos hablando de un derecho fundamental de 12 millones de ciudadanos españoles, como es el expresarse en su lengua materna. Es necesario para acercar las instituciones europeas a los ciudadanos", indicó.
El secretario de Estado hizo hincapié en que para España "la batalla no ha terminado", al tiempo que animó a los ciudadanos, en especial de las regiones más afectadas, a que ejerzan el derecho de petición ante la Eurocámara en línea con lo que van a hacer una serie de Ayuntamientos y Parlamentos autonómicos.
En paralelo, anunció que el Gobierno llevará esta cuestión a la próxima reunión de ministros de Exteriores de la UE del día 15 de mayo subrayando que se trata de una cuestión "de principios, no de algo técnico".
"Voy a manifestar a la Presidencia (austríaca) nuestra sorpresa de que la única institución que ha rechazado el uso de las lenguas cooficiales haya sido el Parlamento Europeo, para que desde el Consejo se inste también a la Eurocámara a que reconsidere su actitud", manifestó.
