Economía/OPA.- Zapatero y Villepin apoyan una política energética común en la UE que esté basada en fusiones "amistosas"

Actualizado: lunes, 13 marzo 2006 17:17

Ponen como ejemplo la experiencia europea de Airbus en el sector aeroespacial

MADRID, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el primer ministro francés, Dominique de Villepin, coincidieron hoy en apoyar una política energética común a nivel europeo, que esté basada en fusiones "amistosas" y que garantice seguridad e interconexión entre países mediante "diálogo, juego justo y acuerdos", tal y como indicó Zapatero en rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa.

"Tenemos una posición compartida en cuanto a la necesidad de que la UE tenga una política energética común destinada a garantizar la seguridad energética de la Unión y que esa política se construya a través de alianzas y teniendo muy presente que estamos ante un sector estratégico, clave para todos", manifestó el jefe del Ejecutivo, quien puso como ejemplo, al igual que De Villepin, la experiencia de Airbus en el sector aeroespacial y en el que participan conjuntamente Reino Unido, Alemania, Francia y España.

"Europa ha sabido hacer las cosas bien en otros muchos sectores de gran importancia como lo que representa Airbus y la contribución y colaboración en la industria aeroespacial", señaló Zapatero antes de resumir su posición al respecto tras las últimas ofertas públicas de adquisición (OPA) en Europa en el sector energético. "Sí a una política energética común. Sí a grupos europeos garantizando seguridad, interconexión y sobre todo haciendo las cosas como se hacen en la Unión Europea mediante diálogo, juego justo y acuerdos", explicó.

En este sentido, consideró como "posible y bueno" el que haya una política energética europea común y que existan grupos energéticos europeos, siempre y cuando cumplan unas "condiciones objetivas lógicas" en este sector "clave" para España y el resto de países europeos.

Zapatero justificó su posición recordando que España tiene una dependencia energética del exterior del 80% y que el abastecimiento por interconexión, "por cierto con Francia", es sólo del 3%. "Por tanto, tenemos como país una primera obligación que es garantizar el abastecimiento", hizo hincapié antes de constatar que la energía, a diferencia de las personas o capitales, no es un bien que circule libremente en la UE. "Siendo la energía crucial para nuestra seguridad económica, para Europa y cada país europeo, una política energética europea hay que hacerla con grandes acuerdos, como se ha hecho con las grandes políticas europeas y no en función de una u otra coyuntura", insistió.

SEGURIDAD ENERGÉTICA

En la misma línea se expresó el primer ministro francés. "Frente a los desafíos del petróleo y del cambio climático, tenemos que dar respuestas. Europa necesita tener una verdadera estrategia para asegurar su seguridad energética y es por ello que queremos avanzar junto a nuestros amigos españoles y los otros socios europeos sobre tres prioridades", indicó al inicio de su intervención.

De Villepin expresó la necesidad de invertir en infraestructuras de transporte y almacenaje, que Europa hable "con una sola voz" para lograr ventajas sobre los países productores y, en tercer lugar, que se creen "grandes grupos europeos de energía" al ser "indispensable" para tener ventajas a nivel mundial. En este punto, subrayó que la OPA entre Suez y Gaz de France, "que se desarrolla desde hace meses", se basa en una doble lógica "industrial y europea".

El primer ministro francés resaltó que tanto la economía española como francesa son abiertas, respondiendo así a las acusaciones de proteccionismo que se han vertido contra Madrid y París en las últimas semanas. "España y Francia concentran un gran porcentaje de presencia extranjera en sus territorios. Uno de cada siete franceses trabaja para una empresa extranjera. Lo que queremos es que, en el marco europeo, las fusiones y cooperaciones se realicen sobre una base amistosa", manifestó tras destacar que la inversión extranjera en su país fue de más de 40.000 millones de euros el pasado año. "La cuestión de la apertura es una evidencia para nosotros", remachó.

Por ello, hizo hincapié en que su Gobierno defiende "la idea de Europa de los grandes proyectos, siempre sobre la base de cooperación y decisiones amistosas", en la que haya grupos nacionales y la posibilidad de que exista un consorcio europeo "que se constituya sobre una base amistosa y no inamistosa".

INTERCONEXIONES FRONTERIZAS

Zapatero y De Villepin abordaron a continuación las interconexiones fronterizas, sobre todo en el sector eléctrico y que interesan a regiones como Cataluña o Aragón. El primer ministro francés indicó que el objetivo de su país sigue siendo el acordado en la última Cumbre hispano-francesa de Perpignan y que pretende alcanzar el umbral de los 4.000 megavatios. "Trabajamos para llegar a ello rápidamente. Ha habido dificultades en el pasado pero estamos deseosos de superar estos obstáculos", señaló.

El presidente del Gobierno, por su parte, recordó que esta cuestión es "muy importante" para España y agradeció el hecho de que De Villepin haya anunciado la toma de decisiones "con carácter inmediato" en este área. "Compartimos una visión de cómo hay que hacer las cosas. Esto no tiene nada que ver con proteccionismo o no proteccionismo, sino con seguridad energética. España ha demostrado que es un país abierto a los capitales, a las personas --como el fin a las restricciones a la libre circulación de trabajadores del Este-- y creemos que Europa tiene que hacer esa reflexión global y conjunta con acuerdos que hasta ahora no se han hecho", concluyó.