VALENCIA, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
La plantilla de la empresa Little Kiss continuará con las movilizaciones para evitar que se apruebe el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que plantea esta firma valenciana de lencería, ubicada en l'Eliana (Valencia), así como para evitar cualquier otra medida de la empresa que pretenda destruir los puestos de trabajo y producir en otros países, según informó en un comunicado CCOO-PV.
El sindicato señaló que esta decisión se debe al "fracaso" de la mediación entre la dirección de la compañía y el comité de empresa. CCOO-PV explicó que la Dirección Territorial de Trabajo se reunió hoy con el comité de la firma de lencería, las federaciones sindicales de Fiteqa CCOO y FIA UGT y la dirección de la empresa.
La mediación, apuntó, contó con la intervención del director general y el director territorial de Trabajo, Román Ceballos y Jorge Ramos, respectivamente. No obstante, según el sindicato, este "intento de mediación" concluyó "sin acuerdo", ya que la dirección de la empresa Little Kiss se ha negado a aceptar tanto las propuestas realizadas por los sindicatos, como las alternativas presentadas por la administración".
"Lejos de presentar un plan industrial que garantice el futuro de la empresa, los directivos de Little Kiss se han ratificado en su pretensión de externalizar la producción, derivando los pedidos a los talleres con los que trabaja habitualmente, a sus centros de trabajo en otros países y al trabajo a domicilio", criticó CCOO-PV.
La última oferta de la empresa contempla la destrucción de 98 puestos de trabajo y unas indemnizaciones para los trabajadores despedidos, que el sindicato consideró "ridículas". CCOO-PV denunció que el grupo empresarial al que está vinculado Little Kiss "lleva años sin realizar ninguna inversión en el centro de L'Eliana, mientras ha potenciado las empresas de las que dispone en China, Túnez y Marruecos".
"Al mismo tiempo ha potenciado el desvío de carga de trabajo a talleres de la Comunitat que fomentan el trabajo irregular a domicilio", agregó el sindicato. Ante esta situación y tras romperse las negociaciones, la decisión de aprobar o no el expediente presentado por la empresa corresponde a la autoridad laboral, señaló CCOO-PV.
