El sector primario es el que se siente más amenazado por la implantación de plantas solares
MADRID, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
Más de la mitad de los españoles, el 56%, se muestra contrario a la instalación de placas solares en suelo agrícola, según ha informado en un comunicado SOS Rural a partir de un estudio de GAD3, en el que también se ha destacado un cambio de percepción en la opinión pública española respecto a las plantas solares.
La encuesta se ha presentado en un evento organizado por la Asociación de Periodistas Agroalimentarios (APAE), en colaboración con SOS Rural, ha analizado la percepción de la población española en torno a las plantas fotovoltaicas, así como su impacto futuro en el campo y posibles soluciones.
Los resultados demuestran que los encuestados apuestan de forma mayoritaria por un modelo de transición energética que respete el campo, el paisaje y las comunidades rurales. Respecto a la percepción que tienen los españoles de las plantas fotovoltaicas, a pesar de que más de un 75% afirma conocer su existencia, la encuesta pone de relieve el gran desconocimiento de fondo que hay sobre ellas.
La mitad de la población española desconoce la posibilidad de que las plantas solares se instalen en terrenos de cultivo, a pesar de que el 56% se muestra contrario a esta utilización del suelo agrícola. Además, prácticamente un tercio desconoce el tamaño medio de las plantas solares, y un 70% de la población cree que son las propias empresas fotovoltaicas las encargadas de gestionar las toneladas de residuos industriales que estas generan.
En contraste, sólo el 6% conoce que esta responsabilidad recae sobre los titulares de los terrenos, es decir, los pequeños propietarios. Según los resultados del informe, existe un mayor conocimiento sobre las consecuencias negativas de la proliferación de macroplantas solares en el territorio. En este sentido, siete de cada diez españoles considera que las plantas solares provocan una reducción de la superficie de tierra disponible para el cultivo.
Entre otros efectos negativos de estas instalaciones, se identifica su impacto en la despoblación y en el precio de los alimentos. Además, para la mayoría de la población, la instalación de plantas solares en el suelo agrícola provocaría un efecto negativo en la disponibilidad de alimentos.
Para la mayoría de los españoles, las grandes empresas multinacionales son, además de las principales dueñas de las plantas solares, las grandes beneficiadas de su existencia. Únicamente un cuarto de los entrevistados cree que la beneficiada sea la población en su conjunto, y sólo un 19% que lo sea el medioambiente.
Además, el motivo principal que señalan los españoles en el uso de plantas solares en España es el cumplimiento con la transición energética. No obstante, la mayoría indica también que se debe a otros factores como el 'greenwashing', ciertos incentivos económicos y la presión de los 'lobbies'.
EL SECTOR PRIMARIO, EL MÁS AMENAZADO POR LAS PLANTAS SOLARES
La presidenta de APAE, Lourdes Zuriaga, ha afirmado que existe "cierta preocupación" dentro de una parte del sector agrario con respecto a la proliferación de plantas solares y su implantación en suelo agrícola.
Por su parte, la directora de Comunicación de GAD3, María Martín, ha apuntado que los resultados del análisis revelan que el desarrollo de las plantas solares no debe comprometer la sostenibilidad local, el paisaje ni el sector agroalimentario.
"La expansión de las energías renovables debe ir de la mano con una planificación integral que garantice un equilibrio justo para las zonas rurales, especialmente para el sector primario, promoviendo un desarrollo que sea beneficioso para todos los actores implicados", ha añadido Martín.
Por otro lado, el secretario general de SOS Rural, Javier Poza Llorente, ha señalado que el estudio "no hace más que confirmar la necesidad de un marco regulador que ordene las fotovoltaicas y que proteja las tierras de cultivo (sobre todo las más fértiles) en España".