SEVILLA 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, consideró hoy que no hay que "quemar a nadie en la plaza pública" y aseguró que no dimitirá mientras siga contando con la confianza del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
"Por insistir más no me voy a ir, lo haré exclusivamente cuando no tenga la confianza de la persona que me ha nombrado", sentenció Álvarez en rueda de prensa en Sevilla en referencia a los problemas surgidos en las obras del AVE a Barcelona, además de apostar por "una solución intermedia".
Así, la ministra del ramo apostó por "un análisis sereno" de la situación, aunque reiteró que "en ningún momento se ha planteado la rescisión del contrato a OHL", pese a admitir que "es verdad que no ha hecho bien ese tramo".
No obstante, consideró que "no se trata del cielo o el infierno, puede haber una solución intermedia" y apuntó que "lo normal es sentarse con la empresa para ver en qué se ha equivocado y cómo se va a subsanar en beneficio de los ciudadanos".
Además, señaló que "la empresa tiene 13.000 trabajadores, no se puede hablar frívolamente" e insistió en que "desde el primer momento se está trabajando con la empresa para reconducir la situación", a lo que añadió que "la cadena de responsabilidades funciona".
"Tratamos de hacer las cosas bien sin tener que quemar en una plaza pública a nadie aunque algunos quisieran", señaló Álvarez, quien criticó que "cada uno quiere quemar a uno" y garantizó que "se han modificado las prioridades del trabajo, se han introducido nuevas empresas especializadas y la empresa se hará cargo de los gastos adicionales".
En cuanto a los plazos de las obras interrumpidas, la ministra de Fomento concluyó que "estarán terminadas cuando se esté seguro de que están perfectamente y no se corre ningún riesgo", ante lo que aseguró que la "prioridad" es la seguridad, seguido de las obras del Cercanías y el AVE.
Así, habló de "causalidades, no casualidades" con respecto a las razones de lo ocurrido y explicó que "una de las diferentes causas que hay que analizar" es que "no se ha hecho el impermeabilizado antes de las lluvias".
"Primero se solucionará la situación y luego vendrá el momento de la exigencia de responsabilidades", concluyó Álvarez, que reafirmó que "todo tiene que tener una medida, hay caminos intermedios, muchas posibilidades".
"COMPROMISO CON LOS ESPAÑOLES".
Con respecto a las peticiones de dimisión en relación con los hechos, Álvarez ironizó que "sólo se acuerdan de Santa Bárbara cuando llueve" y dijo tener "un compromiso con los españoles" que garantizó que va a cumplir.
"Cuando el presidente no tenga confianza en mi trabajo yo seré la primera en enterarme", apuntó la ministra, quien aclaró que no acompañó a Rodríguez Zapatero en su visita este fin de semana a la zona afectada porque no suelen ir "todos en masa a los sitios, hay un reparto".