BARCELONA 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los viajes en transporte público en las ciudades españolas aumentaron casi un 11% entre 2002 y 2005, según datos del Observatorio de la Movilidad Metropolitana presentados hoy en Barcelona en la IV Jornada Técnica de esta institución.
Según ese informe, un 5% del recorrido de los autobuses urbanos se realiza por carriles bus. En el caso de Barcelona, el porcentaje es el doble, a pesar de que la velocidad de estos vehículos es baja, entre 10 y 15 kilómetros por hora, debido a las congestiones de tráfico.
Aun así, el vehículo privado sigue siendo el medio de transporte dominante en la mayoría de las ciudades para realizar desplazamientos, aunque existen diferencias dependiendo de si se trata de un viaje por trabajo o por otros motivos.
Así, en Barcelona, casi el 47% de los desplazamientos por trabajo se realizan en transporte privado, mientras que el 40% se realiza en transporte público. En las ciudades pequeñas y medianas la cifra de uso del coche supera el 60%.
En cambio, por otros motivos --ocio, principalmente--, el coche se utiliza sólo en casi un 25% de los casos, mientras que el transporte público en el 26%. En este campo dominan los desplazamientos a pie. En total, el 30,2% de los viajes se realizaron en coche y el 27,2% en medios de transporte públicos.
Barcelona es la ciudad española donde el porcentaje de viajes dentro de la misma ciudad que se realizan en transporte público es más elevado, con un 40%.
El Observatorio lleva desde 2004 estudiando la movilidad de las 13 ciudades más importantes de España, lo que significa un volumen de población de 20 millones de habitantes y un 45% del total de españoles.
EMISIONES CONTAMINANTES.
El informe del Observatorio destaca también que el crecimiento de las emisiones totales de efecto invernadero en España se debe principalmente al transporte de viajeros y mercancías por carretera, con un 75% de las emisiones de dióxido de carbono procedente de este sector.
Las sustancias acidificantes disminuyeron un 2,3% en el período 1990-2004 y los precursores de ozono un 18,7%. Sin embargo, las emisiones de partículas primarias y secundarias aumentaron un 3% debido al incremento de las nuevas matriculaciones de vehículos diesel, que en 2005 supusieron el 70% del total.
Sin embargo, esta reducción de las emisiones no ha sido suficiente, porque en ciertas zonas se siguen sobrepasando los límites críticos. Además, por lo que respecta a la contaminación acústica, el tráfico rodado supone el 80% del ruido producido en las ciudades.
ACTUACIÓN ESTATAL Y AUTONÓMICA.
El director general de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Alejandre, señaló que, por primera vez, "la comunicación de techos nacionales de emisiones contaminantes ha descendido" gracias a las medidas que las diferentes administraciones están tomando, aunque admitió que los efectos se verán a largo plazo.
Alejandre explicó que "ha parado el crecimiento exponencial del dióxido de carbono" y recordó que España tiene "condicionantes geográficos" que le ponen "más difícil" rebajar los niveles de partículas, en referencia a las "intrusiones saharianas" y al aumento de vehículos que utilizan diesel.
De todas formas, Alejandre subrayó que España es el país donde más se utiliza el coche para los trayectos cortos, ya que en las ciudades, el 80% de los desplazamientos son para trayectos de menos de tres kilómetros.
El representante del Ministerio de Medio Ambiente recordó que en los años 50, el transporte de mercancías en ferrocarril era mayoritario y "ahora no llega al 3%".
LEY DE CALIDAD DEL AIRE.
Para intentar cambiar esta situación, el Gobierno aprobó recientemente la ley de calidad del aire y tiene previstas otras normativas, como un plan de medidas urgentes para luchar contra el cambio climático --que incluiría una propuesta de tributación mayor o menor en función del nivel de contaminación de cada vehículo--, una estrategia española de desarrollo sostenible a nivel urbano y local y una ley básica de movilidad.
Por su parte, la Generalitat está a punto de aprobar el plan de actuación para mejorar la calidad del aire en la región de Barcelona, que incluye como propuesta la reducción a 80 kilómetros por hora en las vías rápidas.
El director general de Políticas Ambientales y Sostenibilidad, Frederic Ximeno, señaló que "no debemos asustarnos con medidas de reducción de velocidad", algo que ya está en vigor en Estados Unidos desde 1945.
En este sentido, Alejandre apoyó a su homólogo y subrayó que en el plan nacional de asignaciones y de derechos de emisión de 2004, el Gobierno ya incluyó propuestas restrictivas de velocidad.