Actualizado 14/09/2011 20:25

La Fundación Kirira consigue reducir la mutilación genital femenina en Kenia

Aranda
JCCM/EP


CIUDAD REAL, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -

La doctora de Alcázar de San Juan (Ciudad Real), Concha Aranda, ha contribuido a reducir la mutilación genital femenina entre las niñas de 6 a 10 años de la región de Tharaka (Kenia), a través de una campaña educativa y sanitaria.

A su regreso a España, la doctora Aranda --que ha permanecido en el continente africano entre el 25 de julio y el 25 de agosto-- ha realizado una valoración "muy positiva" de los resultados de esta experiencia humanitaria en la que ha participado junto a la Fundación Kirira, una ONG creada específicamente para acabar con la ablación en Kenia y que trabaja en la zona desde hace 11 años, ha informado la Junta de Castilla-La Mancha en nota de prensa.

Así, Aranda ha señalado que es primordial seguir trabajando en la educación para la igualdad de la mujer, haciendo ver las graves consecuencias de la ablación del clítoris, como infecciones, hemorragias, no dilatación en el parto con riesgo para la vida de la madre y del niño, problemas psicológicos o el abandono de la escuela.

Su labor, y la del resto de profesionales sanitarios de España que la acompañaron, fue atender la demanda en el dispensario de la zona ofreciendo medicación gratuita e impartiendo educación sanitaria sobre la mutilación y sus consecuencias, el uso de anticonceptivos o medidas higiénico-dietéticas.

En este punto, ha señalado, que a pesar de la importancia que dieron a las medidas anticonceptivas, las mujeres fueron muy reacias a la utilización, justificándose en que los hombres no las dejan usarlos, pues parece que el hombre es más importante en su sociedad cuanto mayor número de hijos tenga, independientemente de que no pueda alimentarlos.

Dicha educación sanitaria se complementó con la realizada en las 23 escuelas a las que cada día se desplazaban para tratar de forma masiva las tiñas capitis que sufren entre el 60-70 por ciento de los niños en edad escolar.

Durante el mes que han permanecido en Kenia atendieron 6.500 consultas, principalmente mujeres y niños con dolores osteo-articulares de espalda y cuello, patologías oculares ,patologías digestivas y desnutrición, sobre todo infantil, siendo habitual la hinchazón abdominal con la protrusión umbilical por la falta de proteínas y vitaminas, incluso en los niños supuestamente alimentados.

En cuanto a las patologías infecciosas graves, el equipo sanitario del que formó parte la doctora Aranda detectó cuatro casos de malaria, tres de fiebre tifoidea y tres casos de tuberculosis muy sintomáticas. Las enfermedades neurológicas y las curas de heridas crónicas completaron el abanico de tratamientos practicados durante ese periodo.

Su trabajo en Kenia ha sido reconocido tanto por las autoridades de la zona como por los encargados del dispensario, quienes dieron las gracias públicamente a los voluntarios de la Fundación Kirira en un acto de clausura donde pusieron de manifiesto que "nunca se había hecho una campaña sanitaria en la zona, tan extensa y con tanto material y medicamentos".