MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
Una de cada cuatro mujeres atendidas en los 28 programas específicos relacionados con la mujer de Cáritas Española, un total de 3.500 de las 13.834 a las que acompañó en 2021, eran víctimas de violencia o se encontraban en contextos de prostitución, según los datos publicados por Cáritas, con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se celebra el 8 de marzo.
Cáritas quiere conmemorar el Día Internacional de la Mujer con una "llamada de atención" sobre los "retos pendientes" para "avanzar en el derecho de las mujeres a la igualdad y a una vida libre de todo tipo de violencia".
"En nuestro día a día, acompañamos a mujeres que se ven inmersas en distintas manifestaciones de violencia y en muchas ocasiones invisibilizadas. Esta invisibilidad no solo vulnera, excluye y estigmatiza a las mujeres que llegan a nuestros recursos, sino que también aumenta el riesgo de que sufran abusos, violencias y explotación", ha apuntado la responsable de los programas de Mujer, Trata y Prostitución de Cáritas Española, Noelia de Pablo.
Además, Cáritas ha advertido de que, en los últimos años, se ha producido un aumento en el número de mujeres en situación de sinhogarismo (20% de mujeres, frente a 80% de hombres). "Se trata de una situación de especial desprotección y vulnerabilidad, así como de una mayor estigmatización", ha explicado De Pablo.
Por otro lado, la labor social de la Iglesia destaca que el 64% de las personas acompañadas en sus programas de empleo son mujeres. "Esta tendencia se mantiene a lo largo de los años, fruto de las múltiples barreras y obstáculos que enfrentan las mujeres a la hora de acceder, mantenerse y progresar en el mercado laboral", ha explicado.
En concreto, Cáritas lamenta que las mujeres son las que tienen "peor tasa de paro", con una brecha salarial situada en el 9,4%. "A esto se une el gran número de mujeres que no trabajan ni buscan empleo por tener que ocuparse de los cuidados", ha señalado De Pablo.
"Esta realidad limita su inserción laboral y tiene graves implicaciones a nivel personal y social: menor independencia económica para decidir sobre sus vidas, menor acceso al ocio y la cultura y menor participación en la vida democrática de su comunidad. Además, son las mayores perceptoras de pensiones no contributivas al llegar la jubilación, por eso las mujeres mayores tienen mayor vulnerabilidad económica", ha añadido.
Dentro del sector del trabajo del hogar, la organización avisa de que "apenas" 39.852 personas figuran como cotizantes a la Seguridad Social. "Gran parte de las trabajadoras realizan su labor sin los derechos y la protección que deberían tener. Se trata de un sector altamente feminizado que además carece del reconocimiento social que merece y que sitúa con frecuencia a las trabajadoras en situaciones de precariedad laboral y desprotección social", ha apuntado.
En el ámbito internacional, Cáritas también ha advertido de que los conflictos, las guerras y las crisis humanitarias "agravan pautas preexistentes de discriminación contra mujeres y niñas" y las exponen a "mayores riesgos de padecer violaciones de derechos humanos".
Pone como ejemplo la guerra de Ucrania, donde las personas en situación de ayuda humanitaria urgente ascienden a 17,7 millones, de las cuales 9,5 son mujeres, citando datos de la Dirección General de Protección Civil y Ayuda Humanitaria; o el conflicto colombiano donde han sido registradas 51.919 mujeres víctimas de este conflicto armado.
Con el objetivo de visibilizar las múltiples brechas y situaciones de exclusión que sufren las mujeres, Cáritas ha lanzado la iniciativa 'Ellas somos nosotras'. Bajo el hashtag #EllasSomosNosotras, esta iniciativa irá dando a conocer en redes sociales distintas realidades de exclusión que Cáritas acompaña dentro y fuera de España. Entre ellas, destacan la brecha digital, la precariedad laboral, el sinhogarismo y las violaciones de derechos que sufren las mujeres en las zonas afectadas por conflictos.
