MADRID, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos UGT y CC.OO han reclamado al Gobierno que en esta crisis del coronavirus tenga la misma consideración con los trabajadores de los centros de mayores y cuidadoras, que para el personal sanitario de hospitales y centros de salud, y que garantice su protección ante contagios para que puedan continuar con su labor y porque cada día exponen a uno de los grupos más vulnerables a la epidemia.
Tanto la secretaria federal de Política Social de CC.OO, Ana González, como la responsable de Salud y Dependencia de UGT, Gracia Álvarez, ha explicado a Europa Press que esta situación "no es nueva", que la "precarización" y la "infrafinanciación" de los centros y de la profesión de cuidadora se lleva denunciando años y que ha tenido que llegar una crisis como la del Covid-19 para demostrar esta situación.
Ambas se refieren a los últimos casos registrados en Madrid y Tomelloso (Ciudad Real), en donde más de una treintena de ancianos han fallecido tras una infección masiva por coronavirus. "En las crisis se demuestran las debilidades y que los mecanismos e protección son débiles, especialmente en determinadas comunidades autónomas", ha indicado González, antes de llamar a actuar de manera "urgente" en la aplicación de medidas de contención.
Uno de los principales problemas de este sector, según ha indicado la portavoz de CC.OO es que no ha cambiado el ratio de trabajadores, cuando el perfil del cliente sí lo ha hecho, pasando de ser un anciano con necesidad de cuidado y compañía, a ser grandes dependientes. Es por eso que González reclama al Ejecutivo que las residencias o centros de ancianos pasen a estar considerados como establecimientos sanitarios, lo que permitiría dotarlos de mejores herramientas e infraestructuras en situaciones como esta. "Algunas residencias se están medicalizando, pero no se refuerzan con recursos sanitarios", ha apuntado.
UNA LEY MAL DOTADA Y MAL USADA
Por su parte, Álvarez pone el foco en las gericultoras y el riesgo en el que se ponen cada día al trabajar con personas que están en el grupo de riesgo, no sólo de contraer coronavirus, sino de desarrollar complicaciones con la enfermedad. Desde UGT recuerdan la necesidad de proteger a estas mujeres que, a menudo, acuden a su lugar de trabajo en transporte público, por lo que esta falta de protección puede poner en peligro a las personas a las que cuidan.
Tanto González como Álvarez han dado la razón al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuando ha señalado en su discurso en el Congreso que esta crisis había mostrado las debilidades del sistema de dependencia y se comprometió a aplicar la Ley de Dependencia de forma "plena" en esta legislatura. "Nació generando grandes expectativas, para los dependientes y porque iba a ser un nicho de creación de empleo y de reconocimiento a las cuidadoras, pero se convirtió en un nicho de creación de empleo precario", ha indicado la representante de UGT.
"Siempre ha estado mal dotada y mal usada políticamente", ha añadido la portavoz de CC.OO, para añadir que la Ley de Dependencia no es la única que ha quedado debilitada por esta crisis sanitaria, sino todo el sistema de protección social de las comunidades autónomas.
