Agua.- Ecologistas critican el trasvase desde el Tajo a Las Tablas y proponen usar el agua de la cuenca del Guadiana

MADRID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los grupos ecologistas mantienen su oposición al trasvase de emergencia de hasta 20 hectómetros cúbicos de agua desde la cabecera del Tajo que el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) pretende acometer en los próximos meses sobre el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel (Ciudad Real), con el objetivo de paliar la escasez de agua en este enclave, lo que ha ocasionado una ignición natural de la tundra que está bajo la superficie.

Así, en declaraciones a Europa Press el coordinador de Ecologistas en Acción de Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Hernández, aseguró que en la reunión celebrada ayer entre el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, y ONG ambientalistas, no se llegó a "ningún acuerdo" porque el Ministerio mantiene su propuesta de "resolver Las Tablas con agua del Tajo", una medida que, a su juicio, no tiene su "viabilidad garantizada, por muchas razones".

Hernández puntualizó que ese trasvase se realizaría probablemente en enero, una época en la que "no hay garantía de que se pueda llevar a cabo" y añadió que le han planteado al departamento que dirige Elena Espinosa que busque "una alternativa" como sería "buscar solución en la cuenca del Guadiana".

Para Ecologistas en Acción la solución "más inmediata" es la utilización de agua de los pozos que están dentro del Parque Nacional, --algo que reconoció que ya está haciendo el Gobierno--, pero también "ampliando el radio de acción de los pozos" con lo que "se podría llevar más agua que con el trasvase del Tajo que se está proponiendo".

A ese respecto, recomendó al Ministerio que recupere las concesiones de agua a pozos privados para riego porque "la ley ampara el uso de este recurso que está en régimen de concesión y no de titularidad en situaciones de emergencia a través de la recuperación del dominio público hidráulico", y apuntó que "sólo" sería necesaria el agua de "entre 30 y 60 pozos" pero, a su juicio, "lo más urgente" es que el MARM "calcule el agua necesaria".

CERRAR LOS POZOS ILEGALES

"Es una cifra ridícula teniendo en cuenta los miles de pozos ilegales que existen en la cuenca del Guadiana, por lo que no estamos de acuerdo con trasladar la responsabilidad a la cuenca del Tajo, a la que no se le pueden pedir más sacrificios", apostilló.

Por su parte, el director de conservación de WWF, Enrique Segovia, que asistió a la reunión de seguimiento celebrada ayer, valoró que las acciones para sofocar el incendio de turba que ya está desarrollando el Ministerio en el Parque Nacional de Las Tablas "son todas positivas y oportunas" y que "está actuando con celeridad".

No obstante, insistió en que desde la organización no están de acuerdo con la propuesta a medio plazo, "para enero o febrero" de inundar las Tablas utilizando el agua de la Tubería de la Llanura Manchega. En su opinión, "tiene que ser" la propia cuenca del Guadiana la que "nutra de agua y solucione ese problema", por lo que se deberá "dar prioridad" a las necesidades de Las Tablas frente a otros usos y en particular al regadío, al que considera "culpable" de la situación actual de deterioro.

Asimismo, denunció que la Junta de Castilla-La Mancha "se está desentendiendo" del problema, por lo que Segovia exigió al departamento que dirige Elena Espinosa que "exija" al gobierno autonómico que "acometa medidas", apague el incendio de la turba y de un giro a la política de agua, comenzando por prohibir "radicalmente" el regadío en la zona de Las Tablas de Daimiel y cerrando "claramente" los numerosos pozos ilegales en la zona para poder regenerar en los próximos años el humedal y su acuífero correspondiente.

Igualmente, el responsable de la campaña de aguas y contaminación de Greenpeace, Julio Barea expresó la oposición de su organización a llevar agua del Tajo para salvar las Tablas porque el parque se puede salvar con la propia cuenca del Guadiana. Además, hasta que se apruebe y acometa el trasvase de emergencia anunciado, recomendó inundar "mínimamente" la zona con la compra de derechos de riego de los pozos del área.

"Ya lo están haciendo, tienen comprados los derechos de agua de 24 pozos, pero están comprando los derechos en pozos legales y no están atajando los pozos ilegales, que se estiman en unos 60.000. De hecho, dos tercios de las extracciones de agua son ilegales", denunció, al tiempo que se mostró sorprendido por "la actitud" de la confederación hidrográfica, que "no le quita los derechos a los regantes".

También indicó que en la reunión de ayer avisaron al Ministerio del riesgo de que "se le echen encima los del Tajo, los del Segura y Portugal", en lugar de tener en cuenta la propia cuenca del Guadiana. "Estamos bastante decepcionados y vemos que no se va a poder solucionar el problema", insistió Barea, al tiempo que explicó que aunque se cerrara el bombeo de todos los pozos, "no brotaría agua de forma natural hasta dentro de cinco o diez años" en Las Tablas de Daimiel.

Finalmente, calificó de "actitud lamentable" la actuación de la Junta de Castilla-La Mancha por favorecer una agricultura "totalmente insostenible" y por no "hacer nada" para luchar contra los pozos ilegales. "Las Tablas de Daimiel tienen un futuro muy negro con estas decisiones", sentenció.