Actualizado 27/10/2007 14:36

Mañana deberán retrasarse los relojes una hora y a las tres de la madrugada volverán a ser las dos

La 'Hora de Verano' ha supuesto un ahorro de iluminación del 5 por ciento y más de 6 euros por hogar


MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -

Mañana domingo, 28 de octubre, finaliza la 'Hora de Verano', que dio comienzo el pasado mes de marzo, y deberán retrasarse los relojes una hora. Así, a las tres de la madrugada volverán a ser las dos, en cumplimiento de la Directiva Comunitaria que rige el denominado 'Cambio de Hora' y que afecta a todos los países miembros de la Unión Europea.

El 'Cambio de Hora' comenzó a generalizarse, aunque de manera desigual, a partir de 1974, cuando se produjo la primera crisis del petróleo y algunos países decidieron adelantar sus relojes para poder aprovechar mejor la luz del sol y consumir así menos electricidad en iluminación. Se aplica como directiva desde 1981 y ha sido renovada sucesivamente cada cuatro años.

Desde la aprobación de la Novena Directiva, por el Parlamento Europeo y Consejo de la Unión, en enero de 2001, este cambio se aplica con carácter indefinido y se incorporó al ordenamiento español en 2002, según informa el Ministerio de Industria en un comunicado.

La Novena Directiva - de obligado cumplimiento para todos los países de la Unión Europea- establece con carácter permanente las fechas de inicio del periodo de la 'Hora de Verano' (en el que se adelanta el reloj una hora) y su finalización (cuando se retrasa el reloj una hora), produciéndose el último domingo del mes de marzo y el último domingo del mes de octubre, respectivamente.

Según un estudio de la Comisión Europea de 1999, realizado por la consultora Research Voor Beleid Intm, el cambio de hora es positivo tanto en lo que se refiere al ahorro de energía como a las industrias del ocio, turismo y salud pública, en cuanto a que los largos atardeceres fomentan el deporte y otras actividades al aire libre.

Según estimaciones del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), en España el ahorro en iluminación en el sector doméstico, por el cambio de hora, durante los meses que este ha tenido efecto; es decir, desde final de marzo hasta final de octubre, puede representar un 5 por ciento. Si el consumo medio de una familia española es de 3.200 kilovatios hora, el ahorro sería de más de 6 euros por hogar y más de 60 millones de euros para el conjunto de ellos.

A ello habría que sumar, procedente del sector de comercio y servicios, un ahorro del 3 por ciento (más de 6 millones de euros) en concepto de reducción de consumo de aire acondicionado. Pero, independientemente del cambio de hora, el IDAE , Entidad Pública Empresarial del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, recomienda que todos los ciudadanos incrementen el ahorro energético haciendo un uso inteligente de la energía en el hogar, en lo que se refiere a la iluminación, aire acondicionado, calefacción, compra de electrodomésticos eficientes, utilización del coche, etc.

DECÁLOGO DE AHORRO EN INVIERNO

Así, en la época en la que comienzan a encenderse las calefacciones de los hogares españoles, el IDAE identifica diez pautas de conducta que pueden ayudar a evitar un consumo innecesario de energía, además de conseguir un ahorro de dinero y beneficios medioambientales para todos.

En primer lugar, abrir las ventanas el tiempo necesario para ventilar las habitaciones (basta con 10 minutos para renovar el aire). También aconseja apagar la calefacción por la noche y no encenderla por la mañana hasta que la casa esté ventilada y se hayan cerrado las ventanas.

Igualmente, hay que cerrar los radiadores que no se precisen para mantener el bienestar en la casa y apagar completamente la calefacción si se va a estar fuera de casa más de un día. También es preferible instalar burletes y adhesivos en puertas y ventanas, se ahorrará entre un 5 por ciento y un 10 por ciento de energía.

Es necesario poner si es posible dobles ventanas o doble acristalamiento porque se ahorrará un 20 por ciento de energía y tener en cuenta que un 40 por ciento de las fugas se produce por ventanas y cristales.

Instalar válvulas termostáticas en los radiadores, o un regulador para la caldera; mantener la temperatura entre los 20 y 22 grados centígrados; no abusar de la calefacción; saber que para dormir es suficiente una temperatura entre 5 y 7 grados centígrados, aunque los niños y los menores pueden necesitar un poco más de calor; y pensar en la instalación de aislantes aprovechando las reformas, son otros de los consejos.