GRANADA, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional ha detenido en Granada a un hombre de 42 años como presunto autor de un episodio de violencia doméstica contra su madre y su hermana, a las que supuestamente propinó diversos golpes en la cabeza, además de insultarlas y amenazarlas de muerte con un cuchillo.
La detención se produjo a raíz de que un agente de la Policía Nacional que estaba fuera de servicio, y que es vecino de las víctimas, escuchara gritos de varias mujeres que procedían de un domicilio cercano, desde donde pudo oír cómo decían "ha cogido un cuchillo y me va a matar", entre otras expresiones similares.
Antes estos hechos, y toda vez que la integridad de esas personas estaba en juego, este agente salió a la escalera y se encontró sentadas en el rellano a dos mujeres, madre e hija, en un elevado estado de ansiedad y nerviosismo, por lo que procedió a preguntarles qué había pasado, según informa en una nota la Policía Nacional.
Una de ellas manifestó que su hijo las había agredido propinándoles diversos golpes en la cabeza, insultándolas y amenazándolas de muerte con un cuchillo. El policía, además de intentar tranquilizarlas, llamó de forma inmediata a la sala de coordinación del 091 para que enviasen dotaciones para que colaboraran con él en la localización y detención del presunto agresor.
Sin embargo, momentos después salió de uno de los domicilios del inmueble un hombre de unos 42 años, hijo de una de las víctimas, y presunto autor de las agresiones, quien, muy alterado, continuó amenazando a las mujeres.
El agente se identificó e, interponiéndose entre el agresor y las mujeres, intentó tranquilizarle, pero el individuo le agredió dándole un fuerte empujón y un puñetazo que pudo ser esquivado por el policía.
De forma inmediata, se personaron en el lugar de los hechos dos dotaciones policiales, que una vez escucharon los hechos relatados por su compañero y las víctimas, procedieron a la detención del hombre por un episodio de violencia doméstica.
Las víctimas manifestaron a los agentes que no era la primera vez que esto pasaba, pero no le habían denunciado por ser de su familia.
El hombre fue trasladado a dependencias policiales y posteriormente puesto a disposición judicial, donde se decretó "en principio una orden de alejamiento del presunto agresor respecto a su madre y hermana".
