Actualizado 05/05/2009 19:35

El número de desplazados internos permaneció estable el año pasado en 26 millones de personas

MADRID, 5 May. (EUROPA PRESS) -

El número de personas que viven en otras partes de su tierra natal después de huir de un conflicto, de violencia generalizada y de violaciones de los Derechos Humanos permaneció en 26 millones el año pasado, una cifra que prácticamente no cambia desde 2007, de acuerdo con un informe del Consejo de Noruega para los Refugiados.

Este informe subraya que los 26 millones de desplazados internos incluyen a los 4,6 millones de nuevos desplazados en 2008, más de 900.000 con respecto a 2007, y un número equivalente de regresos.

África fue el continente más afectado, con 11,6 millones de desplazados internos en 19 países, aunque esta cifra supone un descenso del nueve por ciento respecto a 2007. Estos desplazados, según el informe, "estuvieron expuestos a un amplio rango de discriminación y de violaciones de los Derechos Humanos como resultado de políticas deliberadas o de negligencia".

"En el contexto de prevención de conflictos, el desplazamiento forzoso sigue siendo uno de los desafíos principales, así como la protección de los desplazados internos", señaló el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Antonio Guterres.

El informe señala que el mayor desplazamiento nuevo que se dio el año pasado tuvo lugar en Filipinas, donde 600.000 personas huyeron de los enfrentamientos entre el Gobierno y los grupos armados en la región de Mindanao. También se produjeron desplazamientos masivos de más de 200.000 personas en Sudán, Kenia, República Democrática del Congo, Irak y Sri Lanka, entre otros.

El sur y el sureste de Asia fueron las regiones con el mayor cambio en el número de desplazados internos, con un incremento de un trece por ciento desde finales de 2007. Los países con el mayor número de desplazados internos son Sudán con 4,9 millones, Colombia con más de 4,3 millones e Irak con 2,8 millones.

"Todos nosotros compartimos la responsabilidad de ayudar y mostrar nuestra solidaridad con los desplazados del mundo", declaró la secretaria general del Consejo de Noruega para los Refugiados, Elisabeth Rasmusson. "Millones de desplazados se ven obligados a sobrevivir en condiciones atroces, asentamientos informales junto a las comunidades locales o a esconderse en suburbios urbanos o bosques de los grupos que les desplazaron", añadió.

VIOLENCIA DESPUÉS DE DESPLAZARSE

El informe también señala que en 26 de los 52 países estudiados, los desplazados siguen enfrentándose a los ataques y a la violencia después de su desplazamiento, y subraya los peligros a los que se enfrentan los niños, las mujeres, los ancianos y las minorías étnicas.

Guterres también señaló que el "limitado espacio humanitario" es uno de los muchos desafíos a los que se enfrenta el mundo a la hora de ayudar a las poblaciones de desplazados internos. También lamentó que los presupuestos de muchas agencias humanitarias están disminuyendo mientras que aumentan los problemas de los más vulnerables.

Por su parte, el coordinador de Asuntos Humanitarios de la ONU, John Holmes, opinó que la escala de desplazamientos es horrorosa. "Aunque las cifras cuentan una historia, no cuentan la historia entera", manifestó. "Hay una persona detrás de cada número, y una familia", añadió.