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BARCELONA, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

La entidad SOS Racismo ha criticado las políticas europeas hacia la inmigración, porque el próximo 7 de junio, cuando se celebran las elecciones al Parlamento Europeo, se negará el derecho a voto a los 18,5 millones de inmigrantes no comunitarios que viven en la UE, algo que en su opinión "establece categorías de ciudadanos en función de su origen".

El comunicado destaca, sin embargo, que en la campaña electoral española no ha habido "cerillas electorales", es decir, declaraciones que llenan el debate político con un discurso xenófobo.

Fuentes de SOS Racismo atribuyen esta ausencia de declaraciones a la baja calidad de la campaña, aunque recuerdan el "racismo institucional" de algunas de las medidas impulsadas por la UE, como la llamada 'Directiva de la Vergüenza', la directiva europea de retorno de las personas extranjeras.

Otras de las medidas criticadas son la ley italiana que considera la inmigración ilegal un delito, y el caso de Suecia, que retira la protección sanitaria a los inmigrantes en situación irregular.

Además, también critica las políticas de control de fronteras y de expulsión, que se concretan en los 70 millones de euros que recibió el año pasado la agencia Fortex, y en los vuelos 'charter' para realizar expulsiones. La entidad consideró que este tipo de política comunitaria es la responsable del auge de la extrema derecha en Europa.