El número de comensales inmigrantes cae del 80 al 60% por el aumento en la afluencia de españoles, que constituyen actualmente el 40%
MURCIA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Patronato de Jesús Abandonado ampliará y rehabilitará el comedor social que posee en la calle Barahundillo de Murcia, detrás de la Comisaría de Policía Nacional, gracias a una ayuda de 300.000 euros que la Fundación Cajamurcia destinará en los próximos dos años a tal efecto, lo que permitirá dar un servicio de comidas continuado y eliminar las colas que se formaban a sus puertas.
Las obras, que el Patronato espera ver acabada antes de Navidad o, a lo sumo, en 2010, consistirán en una ampliación de la planta baja, que se destinará en su conjunto como comedor, salvo tres despachos, y el servicio, que hasta ahora consistía en el acceso de los beneficiarios por turnos, pasará a adoptar la modalidad de 'self service', y tendrá una mayor agilidad.
El presidente de la Fundación-Patronato Jesús Abandonado, José Fernández, y el presidente de la Fundación Cajamurcia, Carlos Egea Krauel, firmaron hoy el convenio que hará posible esta rehabilitación y ampliación del comedor, que actualmente cuenta con capacidad para 75 personas, y en el que se organizan tres turnos de comida y otros tres de cena.
Así pues, el comedor atiende a 450 personas diariamente en estos momentos, y "ninguna persona se queda sin comer", confirmó Fernández, quien añadió que la nueva modalidad del 'self service' "permitirá que el comensal entre, coja su bandeja y se vaya después de comer", por lo que se establecerá una rotación que "permitirá comer a 200 personas de forma óptima en un espacio de dos horas".
El horario actual es desde las 12.00 a las 14.00 horas, y de las 19.30 a 20.30 horas. A todo ello, hay que sumar las 150 comidas que se están dando en el centro social de Santa Catalina, donde están 50 residentes permanentemente, duermen y desayunan 200 personas, por lo que "las asistencias ascienden a más de 600 servicios diarios".
En la actualidad, generalmente acuden 200 personas para la comida y 250 para la cena, de forma que "siempre hay más gente para la cena", confirmó Fernández, lo que consideró "lógico, porque trabajan muchos en el campo y no pueden venir". "Nos han obligado a poner tres turnos para que nadie se quede sin comer, hasta hace un mes se daban los bocadillos que hicieran falta, pero se entendía que no era digno", confirmó.
Egea, por su parte, explicó que el coste de las obras se elevará, probablemente, a los 340.000 euros, y consideró que el actual comedor "es insuficiente a todas luces, porque la situación económica conlleva que el número de personas que lo utilizan haya aumentado considerablemente".
De hecho, Fernández indicó que "tiempo atrás teníamos un 80 por ciento de personal inmigrante que acudía al comedor, pero la tendencia está cambiando y ahora hay un 40 por ciento nacional y un 60 por ciento inmigrante". Así, advirtió que "si siguen las cosas como están, llegaremos a la paridad, ya que nosotros no pedimos ni idioma ni color ni raza, el comedor es libre para todo el mundo".
Egea confirmó que la Fundación Cajamurcia, ya aprobó esta rehabilitación en el último Patronato de diciembre, y recordó que la caja de ahorros "tiene una vieja tradición secular de colaboración con Jesús Abandonado desde hace muchos años, pero creíamos que era importante dar este paso".
De hecho, la Fundación Cajamurcia colabora con Jesús Abandonado, dentro de su línea para ayudar a los más necesitados y a los colectivos en riesgo o en situación de exclusión social, a la que destina anualmente cerca de 90.000 euros, cantidad a la que se sumarán en los dos próximos años los 300.000 euros para el comedor social.
Así, determinó que, en ocho años, de 2002 a 2009, la Fundación Cajamurcia "habrá destinado más de 200 millones de euros a actividades de carácter social y cultural, evolucionando paralelamente a las necesidades de la sociedad y otorgando una mayor atención a los colectivos más desfavorecidos".
Por eso, avanzó que este año "vamos a invertir casi un 40 por ciento del presupuesto" a estas labores, lo que "representan unos 15 millones de euros en temas de solidaridad y asistencias sociales, lo que supone un incremento del 15,40 por ciento con respecto al año anterior".
GIRO SOCIAL
En los últimos años, argumentó que la Fundación Cajamurcia "ha dado un giro social muy importante que, sin abandonar su tradicional labor en los temas culturales y la recuperación del patrimonio histórico artístico, pondrá un énfasis mayo en el tema de solidaridad y asistencial, porque es donde hay mayores necesidades".
Fernández agradeció a Egea su colaboración por esta ayuda, que "viene a Jesús Abandonado después de varios años de estar aquí soportando unas colas por la poca capacidad que el comedor tiene, no sólo esto, también por el deterioro de todas las instalaciones".
"Luchábamos desde hace tiempo por esto, pero no era fácil, porque aquí estaba Caritas, el Ayuntamiento de Murcia, y hubo que reordenar el espacio, pero, por fin, el Consistorio tomó la resolución definitiva de solucionar este problema que tenía la ciudad, y gracias a Cajamurcia vamos a ejecutar estas obras", apuntó.
De esta forma, concluyó que las personas, "son iguales que nosotros, aunque hayan nacido en otra parte, tienen que vivir y comer con dignidad, hasta ahora no la había en este comedor, que vamos a adecuar a un mejor funcionamiento, nos permitirá eliminar las colas y dar unas comidas dignas".
Fernández dijo que "no podemos cerrar durante las obras, puesto que no tenemos dónde transferir a los usuarios, por lo que medio comedor se estará arreglando y comeremos en el otro medio, procuraremos que sea todo muy rápido para evitar molestias, pero no podemos cerrar".
