MURCIA, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
La CAM ha participado en la construcción de un colegio en Kenia para la educación de 170 niños de la comunidad Maasai Mara para que puedan tener acceso a la formación en una zona cercana a sus manyatas, lugares donde habitan, sin tener que cruzar la selva durante cinco horas.
De esta manera, esta entidad financiera ha sido la única institución española que ha desarrollado proyectos educativos en esta zona y en la que ahora se trabaja en la ampliación de esta escuela, cuya construcción forma parte de un proyecto global de ayuda a este pueblo que llevan a cabo la Asociación de Desarrollo Comercio Alternativo y Microcrédito (Adcam) y la CAM.
Respecto a este asunto, el presidente territorial de la CAM, Ángel Martínez, ha comentado que con esta escuela, que se inauguró en diciembre, se consigue que los pequeños no tengan que atravesar andando la selva para ir a la escuela.
Asimismo, ha asegurado que este centro que han construido imparte clase hasta tercero de Primaria y en estos momentos se trabaja para intentar ampliarla, para dotarlas de más aulas para poder escolarizar hasta cuarto grado, así como la construcción de una cocina y comedor.
Para este proyecto se han invertido 100.000 euros de los que la CAM aporta un 25 por ciento del presupuesto y se engloba en el proyecto de desarrollo social de los pueblos con impulso de acciones desde el respeto a la cultura y a los Derechos Humanos.
Por su parte, el líder de los Maasai Mara, Kikinae Ole Pere, ha estado en la presentación de este proyecto y ha afirmado que con este centro escolar se cumple su sueño de infancia de poder llevar la educación y el desarrollo al pueblo Maasai.
De esta manera, Kikinae ha comentado que es un orgullo para su pueblo el que 170 niños puedan acudir a la escuela ya que hace unos años la educación y las medicinas no eran necesarias, pero hoy si que son importantes.
Al hilo de este asunto, el líder Maasai ha recordado que antiguamente la gente de la comunidad hacía sus medicinas de manera tradicional, con remedios caseros y a la educación no se le daba el valor que tiene, pero los tiempos han cambiado y necesitamos avanzar, sobre todo, en estos dos aspectos.
Además, Kikinae ha explicado que la construcción de esta escuela solo es el comienzo de un proyecto que tiene que seguir avanzando y ha recordado que este centro ya se ha convertido en un centro polivalente de encuentro entre los miembros de la comunidad.
Esta idea surge hace unos años en Kenia cuando el líder Maasai viaja a la capital, Nairobi, en busca de ayuda para construir un colegio, pero al no encontrar apoyos conoce a la presidenta de Adcam, Rosa Escandell, que le anima a visitar España y presentar su idea a los responsables de la CAM.
Así, este pasado mes de diciembre se inauguró este centro que está construido con materiales nobles, de buena calidad, para que puedan resistir los temporales, lluvias y vientos de la zona, según ha asegurado Escandell.
DERECHO DE LAS MUJERES
Por otra parte, Kikinae es uno de los defensores de la lucha por la igualdad de derechos de las mujeres en la comunidad Maasai, y que de momento ha conseguido que puedan tener propiedades en las manyatas, como es el caso de las vacas que constituyen una de las fuentes de negocio de este lugar.
Esto es algo novedoso, ya que hasta hace pocos años no se conocían fórmulas de negocio o se le daba valor al dinero. El líder de esta comunidad ha explicado que cuando era pequeño encontró una bolsa de unos turistas llenas de billetes de dólares que, como les llamaron la atención, recortaron la imagen del billete e hicieron un collage con todas ellas. "Si hubiese sabido que era dinero y para que servía ya tendría construido el colegio", ha comentado riendo Kikinae Ole.