AI responde al Vaticano que no tiene política proaborto sino que garantiza la seguridad de mujeres en ciertos supuestos

MADRID 14 Jun. (EUROPA PRESS) -

Aministía Internacional (AI) aseguró hoy que no mantiene ninguna política proaborto sino que defiende que se le practique de forma segura cuando una mujer quiere interrumpir el embarazo en determinados supuestos como por ser fruto de una violación, un incesto o cuando la madre corre grave peligro, además de que ninguna sea encarcelada o condenada a pena de muerte por ello.

"No llamamos a nadie a abortar", afirmó hoy en declaraciones a Europa Press la responsable de Campañas e Investigación de AI, Eva Sorellanos. En este sentido, reclamó que se dé una información "completa" a hombres y mujeres sobre salud sexual y que se deroguen las leyes penales que permiten acusar, encarcelar o sancionar a mujeres por abortar.

Así respondió AI a la petición lanzada por el Vaticano para que los católicos no ayuden a esta organización por su política proaborto. "Sólo queremos garantizar el aborto seguro en casos de agresiones sexuales, incesto o grave riesgo para la salud de la madre", añadió esta representante de AI ('www.es.amnesty.org'), asegurando que la política de esta organización está "solidamente" enmarcada en las declaraciones internacionales de Derechos Humanos.

Como ejemplo de sus actuaciones en este ámbito, explicó que AI trabaja así en países como República Democrática del Congo y Sudán para ayudar a mujeres embarazadas por violación, práctica utilizada --a su juicio-- "como arma de guerra" en estos estados. En Nigeria, lucha por que se elimine la pena de muerte par alas mujeres que aborten y en México, que las que hayan abortado tras una violación tengan la posibilidad de acceder al servicio sanitario legal.

Finalmente, Sorellanos quiso aclarar un "malentendido" explicando que AI no recibe financiación de ningún gobierno ni del Vaticano ni la Iglesia católica, puesto que se trata de una organización "independiente" de ideologías políticas y religiosas, con lo que únicamente recibe aportaciones económicas de sus socios y simpatizantes.