Actualizado 03/10/2011 18:58

Cruz Roja avisa de que diez años después, la situación de seguridad en muchas zonas de Afganistán es alarmante

GINEBRA, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha advertido este lunes en un comunicado de que la situación de seguridad en "muchas zonas" de Afganistán continúa siendo alarmante diez años después de la invasión militar estadounidense que puso fin al régimen de los talibán.

"A pesar de las mejoras en la calidad de vida en ciertos sectores de la población en la última década, la situación de la seguridad en muchas áreas del país continúa siendo alarmante", ha afirmado el jefe de Operaciones del CICR en Asia Meridional, Jacques de Maio.

En su opinión, "es imprescindible que las víctimas de este continuo y polifacético conflicto reciban protección y asistencia. "Estamos particularmente preocupados por los civiles situados en la línea de fuego, las familias desplazadas que se han quedado sin nada, los enfermos y heridos que no pueden obtener asistencia y los trabajadores sanitarios acosados cuando intentan atender a una población desesperada", ha añadido.

El CICR ha advertido de que el acceso a la asistencia médica se encuentra en un crítico punto bajo en las áreas más afectadas por el conflicto, en las que algunas clínicas permanecen cerradas por los combates, los ataques y por la intimidación que sufre su personal.

"Las carreteras están minadas o bloqueadas por puestos de control, por lo que las personas que llevan a enfermos y heridos a los hospitales sufren largos retrasos, en algunas ocasiones con trágicas consecuencias", ha asegurado De Maio.

Además, debido a la pobreza, muchos afganos no pueden permitirse pagar el transporte de sus familiares enfermos o heridos hasta los hospitales desde remotas zonas rurales. El CICR ha asegurado que muchas comunidades de zonas rurales se sienten ahora más vulnerables que nunca y que la población desplazada por el conflicto representa un 40 por ciento más que el año pasado en varias regiones del norte del país.

"Los habitantes de muchas regiones, en particular de las localidades de Wardak y Logar, en el centro del país, lamentan que ya no se sienten seguros porque todas las partes en el conflicto las intimidan y las fuerzan a que tomen partido", ha afirmado el jefe de Operaciones del CICR en Asia Meridional. "Lo único que desean realmente estas personas es que no les pase nada malo", ha subrayado.

Cruz Roja ha asegurado que la malnutrición en el sur de Afganistán ha aumentado en el último año y tiene como "factor agravante" el "conflicto permanente", sumado a otros factores como "una educación deficiente, la inseguridad, la pobreza y la falta de higiene. "En las zonas donde los enfrentamientos siguen haciendo estragos, se han disparado las epidemias estacionales, como el sarampión", ha advertido la organización internacional.

Conforme se desarrolla el proceso progresivo de retirada de tropas internacionales, el CICR está supervisando "de cerca" la forma en que las fuerzas de seguridad y defensa afganas "llevan a cabo sus tareas, en particular las relacionadas con los detenidos". "La institución expresa su preocupación por la población civil a todas las partes en el conflicto, también a los grupos de oposición armada, y examina con ellos la obligación que tienen de respetar y hacer respetar el derecho internacional humanitario", ha asegurado.

Presente en Afganistán desde hace 25 años, el Comité Internacional de la Cruz Roja ha dejado claro que "sigue empeñado en ayudar a las personas más vulnerables de ese país". "Proseguiremos nuestra labor estrictamente humanitaria manteniendo al mismo tiempo nuestra independencia frente a todas las iniciativas diplomáticas y políticas, y haciendo todo lo posible por que todas las personas reciban la asistencia que precisan con tanta urgencia", ha concluido De Maio.