MADRID 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
El verano multiplica por tres el número de personas que viven solas, que pasa de un millón y medio a cuatro millones y medio, a causa de que las familias que habitualmente cuidan de sus mayores durante el año los dejan en casa solos en verano para tomarse vacaciones.
La ONG Solidarios afirma que la soledad es uno de los problemas "más graves y más duros que sufren las personas mayores", por lo que esta asociación realiza "un llamamiento para que en verano ningún anciano quede sin compañía".
Según un comunicado emitido por esta asociación, "muchas de estas personas no hablan con nadie durante semanas, otras ni siquiera pueden salir de su casa por discapacidad o porque su vivienda no está adaptada a sus necesidades y precisan de personas que les ayuden a suplir el no poder valerse por sí mismas".
Para Solidarios, "dos o tres horas a la semana son suficientes para dar un paseo, tomar un café y acompañar a uno de estos mayores". Según la ONG, "es un tiempo que no supone un gran esfuerzo en nuestras ocupadas agendas y que para ellos significa mucho".
En Solidarios, un 25 por ciento de los voluntarios trabaja por los mayores en programas destinados a terminar con la soledad y a mejorar su autoestima. En 2006, más de 350 personas recibieron esta ayuda y el número de voluntarios que participó en este programa alcanzó los 300. Esta organización cubre más de un 10 por ciento de las necesidades de este grupo social que, "por su edad, sus limitaciones y las pensiones miseria que cobran ha pasado a ser un grupo marginal".
Solidarios (www.solidarios.org.es) nació hace veinte años en el seno de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), con el voluntariado social como objetivo y sin vinculación política, religiosa o confesional de ningún tipo. Los mayores se han constituido como uno de los grupos con más interés en su trabajo debido a que son "aparcados" por el resto de la sociedad.