GIJÓN/VALLADOLID 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
Agentes Del Cuerpo Nacional de Policía adscritos al Grupo Operativo de Extranjeros de la Comisaría de Gijón han detenido a tres personas implicadas en una red para el favorecimiento de la inmigración ilegal, con prácticas dedicadas a la introducción de ciudadanos extranjeros en España que contravenían la legislación vigente en materia de extranjería y la normativa sobre el paso de fronteras.
La Policía estima que la red pudo haber estafado a 421 extranjeros y mantiene abierta la investigación y busca al cabecilla de la red, que también extendió su actividad a varias provincias de Castilla y León.
La investigación llevada a cabo en el marco de la operación Torre, se inició en el mes de junio del pasado año, mediante la denuncia e informaciones proporcionadas por varias víctimas, que alertaban de que varias personas se ofrecían a regularizar la situación de los extranjeros en España ofreciéndole servicios de asesoramiento y de realización de trámites jurídicos a cambio de una contraprestación económica.
A raíz de dichas informaciones los agentes iniciaron las investigaciones sobre un centro de gestión de Gijón, que cambiaba de sede con frecuencia y cuyos empleados parecían estar dedicados a "captar" a ciudadanos extranjeros con promesas de residencia y de trabajo.
Su 'modus operandi' consistía en contactar con los extranjeros, mediante anuncios colocados estratégicamente en locutorios, cabinas telefónicas, lugares de encuentro, o en periódicos dedicados a ofertar empleo, e incluso los abordaban en la vía pública ofreciéndole cobertura legal para dejar de estar irregulares en este país. De este modo, se les prometía la concesión de la autorización de residencia y trabajo, ocupando puestos de los denominados de "difícil cobertura".
Asimismo se les solicitaba una cantidad de dinero --entre los 1.000 y 1.500 euros-- que debían abonar en dos plazos en concepto de abono para sufragar los costes de los trámites de regularización. Así, en una primera entrevista, en la que debían aportar su documentación personal, debían pagar la mitad de la cantidad acordada, y la otra mitad, una vez que se hubiese presentado su solicitud en la correspondiente Delegación o Subdelegación de Gobierno.
Según informó la Policía en una nota de prensa, aprovechándose de la situación de precariedad en las que se encontraban estos ciudadanos, y en sus ansias para regularizar su situación y la de su familia, se les incitaba a efectuar estos mismos trámites para los allegados y conocidos que aún estuvieran en el país de origen y que quisieran emigrar a España, alentándolos con falsas promesas de colocación inmediata en alguna de las muchas empresas que supuestamente administraban.
En el transcurso de la investigación se comprobó que la cabecilla de esta red era una mujer vecina de Gijón que figuraba como administradora única de seis empresas con sede social en una localidad de Alicante cuyo objeto social era la construcción y rehabilitación de inmuebles.
Se pudo constatar que estas sociedades carecían de actividad alguna, constituyendo "empresas ficticias", y por tanto sin la posibilidad de dar ocupación en ellas a ningún ciudadano extranjero, a quienes engañaban presentando su oferta de empleo en cualquier Delegación o Subdelegación de Gobierno, con un fin meramente recaudatorio y fraudulento.
Con la simple presentación de la solicitud, sellada con el registro de entrada, justificaban la formalización de su oferta, y exigían a los extranjeros la entrega del segundo plazo de la cantidad previamente acordada.
Finalmente las víctimas ante la demora de los trámites y la imposibilidad de localizar a los responsables de las compañías empleadoras, tuvieron la sospecha de haber sido engañados, por lo que algunos perjudicados decidieron poner estos hechos en conocimiento de la Policía.
Los investigadores pudieron determinar que al menos 421 personas extranjeras habían sido objeto de esta estafa, no consiguiendo su regularización ninguna de ellas. Sus solicitudes habían sido presentadas no sólo en Oviedo sino también en diversas ciudades del territorio español- Ávila, León, Palencia, Salamanca, Albacete, Madrid, Alicante y Murcia - donde esta organización también desplegó su operativa fraudulenta.
La mayor parte de los afectados son de origen senegalés, colombiano y marroquí, nacionalidades a los que pertenecen dos de los detenidos, que eran los encargados de su captación.
Se estima que el valor de lo defraudado puede superar los 600.000 euros y que pueda haber muchos más extranjeros estafados que no hayan denunciado los hechos por temor a ser expulsados.
Una vez recabados testimonios y pruebas sobre la operativa de esta trama, los agentes procedieron sucesivamente a la detención de tres personas, vecinas de Gijón, dos mujeres -una asturiana y otra colombiana- y un varón, natural de Marruecos, detenido éste último el día 13 de enero, a los que se les imputa los delitos de estafa y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros .
Los detenidos pasaron a disposición del Juzgado de instrucción número 2 de Gijón, siendo la magistrada titular del mismo, quién ha dirigido y coordinado la actividad jurisdiccional de esta operación.
La diversa documentación intervenida durante las actuaciones policiales está siendo analizada, por lo que la investigación continúa abierta con la colaboración de efectivos tanto de Órganos Centrales como de otras plantillas, al objeto de determinar el alcance y dimensión total de la trama y para la detención de la principal cabecilla, que no ha podido ser localizada por encontrarse en paradero desconocido, y sobre la que está cursada Ordenes de Búsqueda y Detención.