MADRID, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
Proyecto Equo ha mostrado su satisfacción por la sentencia de 14 días de prisión suspendida dictada este lunes contra su promotor, Juan López de Uralde y los diez activistas de Greenpeace que irrumpieron en la Cumbre del Clima de Copenhague (Dinamarca) en diciembre de 2009, ya que rebaja "de forma considerable" las peticiones iniciales de la Fiscalía danesa.
Juan López de Uralde y los diez activistas han sido condenados a 14 días de prisión suspendida, por lo que no irán a prisión, al tiempo que Greenpeace Nordic, la delegación danesa de la organización ecologista, ha sido condenada a pagar unos 10.000 euros de multa. Asimismo, el juez ha eliminado la petición de deportación y de prohibición para los activistas de entrar en Dinamarca durante seis años.
Según informa Equo en un comunicado, que la sentencia final absuelva a los activistas del delito de 'lesa Majestad' "evidencia que la petición inicial del fiscal --que posteriormente rebajó-- de penas de cárcel para los activistas por falsificación de documentos, allanamiento de la morada de la reina y suplantación de funcionario público era absolutamente desproporcionada".
A su juicio, esta petición del fiscal danés "respondía más a una persecución política que a una realidad, ya que se trató de una protesta pacífica ante una situación grave: la pasividad de los políticos mundiales ante el cambio climático". De esta forma, destaca que el empeño del fiscal de acusar a los activistas de allanamiento de morada de la reina es "especialmente relevante".
Según agrega Equo, esta acusación no se utilizaba desde 1935 y ha sido denegada por el juez, que también ha desestimado la petición de deportación contra los activistas. Asimismo, recuerda que la pena de cárcel dictada por el juez es inferior al tiempo que los activistas pasaron en la cárcel en las Navidades de 2009.
Igualmente, destaca que esta sentencia también demuestra, a su juicio, "que el tiempo que los activistas permanecieron en la cárcel tampoco está justificado y que, con esta medida, lo que el Gobierno danés pretendía "era dar ejemplo y amedrentar a la sociedad civil que legítimamente protestaba por el fracaso de la cumbre".
Finalmente, Proyecto Equo cree que "los verdaderos culpables son los políticos que acudieron a Copenhague y que fueron incapaces de llegar a un acuerdo justo y vinculante sobre un asunto tan serio que está afectando ya a la vida de cientos de miles de personas y que, si no se toman las medidas oportunas, puede ser letal para pueblos enteros".