Publicado 24/09/2019 19:04

Formación y talleres para que personas reclusas consigan 'Un futuro en libertad'

Una voluntaria forma a personas reclusas  y exreclusas.
Una voluntaria forma a personas reclusas y exreclusas. - BANKIA/FUNDACIÓN INTEGRA - Archivo

   MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -

   Bankia y la Fundación Integra han renovado su colaboración en el proyecto 'Un futuro en libertad' para mejorar la empleabilidad de personas reclusas en tercer grado, exreclusas o jóvenes en libertad vigilada, con el objetivo de que puedan integrarse en la sociedad gracias a un trabajo.

   La iniciativa, que se lleva a cabo desde 2015, pretende fomentar la integración de este colectivo en riesgo de exclusión social a través de la formación en habilidades sociolaborales para encontrar un empleo, "comenzar una nueva vida y recuperar su valía personal y su independencia".

   En este sentido, Pablo, una de las personas beneficiarias de este proyecto y que posee el segundo grado con permiso de trabajo, ha asegurado que esta iniciativa le ha dado "un soplo de vida y de esperanza" para su reinserción real en la sociedad, así como "una gran satisfacción personal".

   Asimismo, ha lamentado haberse quedado "estancado" en el mundo laboral por el tiempo que ha pasado en la cárcel, al tiempo que ha subrayado que la sociedad "también está ahí" para juzgar a las personas en su situación.

   Pablo ha añadido que antes de formar parte de este proyecto "sentía mucho miedo" por si no le aceptaban en ningún trabajo por haber estado en prisión y ser "incapaz" de integrarse.

   En este sentido, tanto para él como para otros de sus compañeros encontrar un trabajo ha supuesto sentirse "útil y realizado" y les ha permitido levantarse "con ganas" cada mañana para ir a trabajar.

    Para ayudarles en su mejora de la empleabilidad, así como en su motivación y autoestima, los voluntarios de Bankia imparten talleres en la Escuela de la Fundación para ayudarles a "ponerse en acción" y aumentar sus probabilidades de superar con éxito una entrevista de trabajo.

   Desde su inicio en 2015, el proyecto ha beneficiado a más de 70 personas salidas de la cárcel en Madrid, Barcelona y Valencia, de las cuales el 60 por ciento ha encontrado un empleo.