Publicado 30/07/2021 15:31

Las auditorías detectan pérdidas en Villas Turísticas y defienden regular personal de la Real Escuela de Arte Ecuestre

Archivo - Jinetes de la Real Escuela de Arte Ecuestre (Foto de archivo).
Archivo - Jinetes de la Real Escuela de Arte Ecuestre (Foto de archivo). - REAL ESCUELA DE ARTE ECUESTRE - Archivo

SEVILLA, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local de la Junta de Andalucía ha hecho públicas este viernes en el Portal de Transparencia los informes de auditorías realizados sobre sus entes instrumentales, que "vienen a confirmar los resultados económicos negativos" de la Red de Villas Turísticas, a la vez que, en relación a la Real Escuela de Arte Ecuestre, concluyen que puede mantener su desarrollo, aunque sería necesaria una mejor regulación en materia laboral.

Dicha regulación "ya se está abordando" y ha venido acompañada con acciones de promoción y difusión de su actividad, según ha explicado la Consejería en un comunicado en el que ha detallado también que, sobre la Empresa Pública para Gestión del Turismo y del Deporte de Andalucía S.A., el informe determina que puede mantenerse "sin necesidad de abordar grandes cambios".

La Red de Villas Turísticas es una sociedad cuyo capital social fue asumido al 100% por la Empresa Pública del Turismo en 2014 con el fin de paliar la situación económico financiera en la que se encontraba y que aglutina a un total de nueve villas distribuidas por toda Andalucía.

De esas nueve, cinco están abiertas, que son las de Bubión (Granada), Cazorla (Jaén), Grazalema (Cádiz), Laujar de Andarax (Almería) y Priego de Córdoba (Córdoba), mientras que las otras cuatro permanecen cerradas, que son las de Pinar de la Vidriera (Granada), Fuenteheridos (Huelva), Axarquía (Málaga) y Cazalla de la Sierra (Sevilla).

La conclusión más clara a la que llega la auditoría de las Villas Turísticas es la "mala situación económica" de esta sociedad, con unas pérdidas por importe de 1.995.335 euros, dado el negativo margen de beneficios que reportan los servicios prestados de cada una de las que están abiertas y "el lastre que para la cuenta de explotación de la supone mantener las que permanecen cerradas, ya que implican unos costes fijos significativos", según relata la Consejería.

Para los auditores, las Villas no están realizando un servicio público, carece de un Plan de Acción Comercial actualizado y no se mide la consecución de objetivos en base a las partidas presupuestarias asignadas.

Además, la ocupación media en 2018 era del 47%, diez puntos porcentuales por debajo de la media del sector hotelero, a lo que el documento añade el "elevado coste" en alimentación y bebida para restauración. Por último, señala que de los alojamientos que están cerrados solo podrían tener potencial la de Fuenteheridos.

En este sentido, el vicepresidente y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Juan Marín, ha destacado que "estas auditorías vienen a constatar todo lo que a nuestra llegada al Gobierno sospechábamos que estaba ocurriendo en los entes públicos instrumentales". "Era necesario acometer estas auditorías para cuantificar el despilfarro de dinero público durante 37 años de gobiernos socialistas", ha incidido.

"Nos encontramos con esta Red de Villas totalmente infrautilizadas, que ni siquiera estaban dadas de alta, algo que hemos tenido que hacer nosotros, con algunas de ellas cerradas y soportando un coste económico que no tiene sentido", ha continuado Juan Marín, quien ha hablado así de "otro ejemplo más de la mala gestión de los ejecutivos anteriores".

Por ello, "desde la Consejería hemos actuado intentando revertir estos malos resultados económicos fomentando la promoción de aquellas que están abiertas, para mitigar estos gastos y dar ese servicio para el que se crearon", ha defendido el vicepresidente, quien también ha puesto de relieve que "hemos unificado procesos administrativos para agilizar trámites".

LA REAL ESCUELA Y LA EMPRESA DE TURISMO

En cuanto a la Real Escuela, el informe sostiene que dicha entidad puede mantener el desarrollo de sus actividades, ya que "ha sido eficaz en la consecución de sus objetivos y no existe en este momento en Andalucía otra entidad instrumental que desarrolle actuaciones en el ámbito del mundo ecuestre del tipo de las que realiza la fundación", como son la cría, competición, investigación, formación y exhibiciones.

A esto se une el hecho de que su sede se encuentra en Jerez de la Frontera (Cádiz), donde el caballo es "uno de sus mayores atractivos económicos, turísticos y culturales", según subraya la Consejería que dirige Juan Marín.

No obstante, la auditoría sí advierte que "es necesaria una regulación en materia laboral", y destaca que la nómina de la fundación está un 13,37% por encima de la media de otras entidades públicas andaluzas del sector cultural, así como que el 50% de los costes de la Real Escuela son de personal, lo que "minora la capacidad de invertir en la prestación de servicios".

Por ello, recomienda un análisis de los costes fijos y la búsqueda de fuentes adicionales de financiación como programas de formación no profesional destinado a la ciudadanía en general o aumentar la cartera de servicios complementarios.

"Es una línea en la que ya estamos trabajando incluso antes de contar con el Plan de Mejora y Simplificación del Sector Público Instrumental porque ya estamos en negociaciones con los sindicatos para abordar una reforma del convenio colectivo", ha indicado Juan Marín, quien ha subrayado que "también hemos incluido nuevas actividades que reporten fondos a la Real Escuela, como visitas escolares o convenios con las universidades para el desarrollo de prácticas y la venta de ejemplares".

Ha precisado que "una de las áreas en la que más hemos trabajado es la difusión y promoción, en gran parte gracias al fomento de las redes sociales, que nos ha permitido en momentos tan complicados como el que hemos vivido durante el confinamiento llevar la Real Escuela al mundo con retransmisiones 'on line' que han sido seguidas por millones de personas de todos los rincones", ha añadido.

Por último, en cuanto a la Empresa Pública de Turismo, los auditores concluyen que puede mantener su actividad "sin necesidad de abordar grandes cambios en la misma". De hecho, el principal problema de la misma, según continúan desde la Junta, es la "falta de comunicación interna" entre sus departamentos y con la Consejería, "pero es una cuestión en la que hemos trabajado desde nuestra llegada articulando un sistema de trabajo, con reuniones, encuentros, que permiten que el flujo de información entre la Consejería y la Empresa sea constante", según ha matizado Marín.