Gobierno vasco revisará en el tercer trimestre de 2022 el escenario macroeconómico con el que se elaborarán los prespuestos vascos
VITORIA, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno Vasco ha aprobado este martes las directrices presupuestarias que guiarán el diseño del presupuesto de 2023, que debe servir para "afianzar la reactivación económica y afrontar los retos futuros", de manera que se apuesta por diseñar unos Presupuestos "fuertes, solidos y capaces de traccionar la economía y el bienestar, desde la responsabilidad y rigor". El Ejecutivo revisará en el tercer trimestre de 2022 el escenario macroeconómico con el que se elaborarán las Cuentas.
En la rueda de prensa posterior al consejo de Gobierno, el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, ha explicado las directrices del Presupuesto, que el Gobierno vasco planteará bajo el prisma de mantener "una política presupuestaria tractora y responsable". El Consejo de Gobierno del 25 de octubre aprobará el proyecto de Presupuestos.
En su intervención, Azpiazu ha subrayado que el sector público seguirá actuando como "motor de la inversión y el crecimiento a largo plazo", para construir una Euskadi "más ecológica, digital y volcada en las personas, con el eje transversal de la perspectiva de género".
Según ha subrayado, los Presupuestos de 2023 se enmarcan en el objetivo de profundizar la recuperación de la crisis ocasionada por la pandemia sanitaria y amortiguar las consecuencias derivadas de la invasión rusa de Ucrania.
Estas directrices se han aprobado en un escenario económico en el que la economía vasca creció en 2021 un 5,6% y ha mantenido ese "dinamismo" en el primer trimestre de 2022, para el que se ha estimado un incremento interanual del 5,7%. El consejero ha avanzado que la información relativa al segundo trimestre no hace pensar que el ritmo de crecimiento se esté "frenando de forma acusada", por lo que anticipa que la tasa resultante será "elevada".
En concreto, se estima un crecimiento del PIB en 2022 más moderado que el de 2021 y se mantiene en el 4,5%, con una tasa de paro que se situaría en el 9,5%, mientras que para 2023 el crecimiento estimado es del 4,1% con una tasa de desempleo que desciende al 9,1%.
No obstante, Azpiazu ha adelantado que, cuando dispongan de datos macroeconómicos definitivos del segundo trimestre de 2022 y una actualización de los principales indicadores socioecónomicos, se realizará, en el tercer trimestre de 2022, una revisión del escenario macroeconómico que será el que se tenga en cuenta para la elaboración definiva de las Cuentas.
Entre las apuestas de los presupuestos, estarán la de acelerar la implantación de las tecnologías clave como la conectividad 5G, el trabajo por una educación "inclusiva, equitativa y de calidad" o potenciar la atención primaria y reforzar la plantilla estructural de Osakidetza, además de incidir en el empleo y la protección social.
Asimismo, Azpiazu ha destacado el "compromiso sólido" del Gobierno vasco por la estabilidad presupuestaria. Según ha apuntado, en los momentos de crecimiento económico, el Gobierno debe esforzarse "en mantener saneadas las cuentas públicas" y apuesta por unir los incrementos de gasto público corriente a la senda de crecimiento potencial de la economía y al crecimiento estructural de los ingresos públicos.
"No es conveniente emplear los incrementos de ingresos públicos, ni el potencial de endeudamiento que tienen naturaleza coyuntural y están ligados al crecimiento de la economía, para incrementar el gasto público corriente de carácter estructural", ha indicado Azpiazu que ha rechazado que los elementos que "alteran" las cifras de ingreso público y que tienen "motivos pasajeros" sean la base de cálculo para incrementar el gasto público.
(Habrá ampliación)
