SAN SEBASTIÁN, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Ertzaintza ha detenido este pasado miércoles en la localidad guipuzcoana de Irun a un joven después que detuviera el tráfico, golpeara a los ocupantes de un coche y arremetiera después con un machete contra varios ertzainas, sin causarles daños personales. El arrestado tiene antecedentes policiales por varias agresiones a agentes policiales y por llevar armas de forma habitual.
Según ha informado el departamento vasco de Seguridad, los hechos se produjeron tras recibir la Ertzaintza una llamada ciudadana indicando que un joven estaba generando altercados en el barrio de Pio XII de Irun. Recursos de la Ertzaintza se personaron en el lugar y recogieron o el testimonio de varias personas que explicaron cómo un joven se había lanzado a la calzada parando el tráfico, golpeando a un vehículo y a sus ocupantes y después abandonó el lugar.
Los agentes comenzaron la búsqueda por las inmediaciones tras recoger la descripción del agresor, al que lograron localizar y que, ante la presencia policial, emprendió la huida.
Tras realizar las gestiones de investigación oportunas se supo que el domicilio del joven se encontraba en las proximidades. Varios recursos se dirigieron al exterior de su domicilio. Desde fuera, intentaron entablar una conversación con el sospechoso, que se hallaba en el interior y se asomó a la ventana de su domicilio. Finalmente, el acusado accedió a hablar con los agentes en la puerta del.
Cuando un grupo de agentes, debidamente protegidos, se acercó, el varón abrió la puerta y arremetió contra los ertzainas armado con un machete.
Los policías lograron repeler el ataque, reducir y detener esta persona. Tras el arresto se le intervino el machete, una carabina de aire comprimido y utensilios que podría haber sido usados como armas, como una horquilla de huerta y una llave de cruceta.
El detenido, con antecedentes policiales, fue llevado a dependencias policiales de la Ertzaintza de Irun para dar inicio a las diligencias policiales y preparar su puesta a disposición judicial. Las personas que sufrieron la agresión que originó la actuación policial sufrieron lesiones menos graves y han interpuesto denuncias en la comisaría.