Foto: OBISPADO
Cree que ha "acertado con los caminos elegidos" para abordar "los problemas" de la Diócesis de San Sebastián
BILBAO, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, ha planteado que no se cerraría a realizar una mediación para la paz en Euskadi "en una situación excepcional", aunque no le parece "ni remotamente probable" que se pueda dar, y siempre previo permiso del Papa.
En una entrevista en Radio Euskadi, recogida por Europa Press, ha indicado que se ha reunido con la consejera de Educación, Isabel Celaá, después de que él hablara del fracaso educativo, para explicarla que se estaba refiriendo a todo el ámbito occidental y no a la Comunidad Autónoma Vasca. "Es una serpiente de verano que no tiene fundamento en la realidad", ha asegurado.
Preguntado por la experiencia en su inicio como obispo de San Sebastián, cargo en el que lleva nueve meses, ha explicado que está "razonablemente contento", aunque ha reconocido que "la situación era complicada".
"Me comprometí ante todos a abordar los problemas, a no huir de ellos, a abordarlos por el camino del diálogo, de los encuentros personales, del conocimiento personal. No voy a ser tan ingenuo de decir que los problemas están todos solucionados, ni mucho menos, pero sí que estoy contento porque creo que hemos acertado con los caminos elegidos", ha destacado.
Sobre la labor fundamental que debe desarrollar la Iglesia vasca en su conjunto, ha indicado que no la considera "distinta sustancialmente" de la de otros lugares.
"En Occidente estamos todos bajo el influjo de una secularización muy grande. Creo que tenemos que conjugar básicamente el servicio a la caridad y el servicio a la verdad", ha explicado, en referencia a la "caridad con los pobres" y la "explicación de los contenidos dogmáticos" católicos.
"LECTURA POLÍTICA"
Además, ha indicado que en el País Vasco existe el "riesgo" de que se quiere hacer "una lectura política" de cualquier manifestación o decisión.
"Es un riesgo y creo también que forma parte de un camino de sanación y de normalización --el lograr-- la despolitización de esa excesiva mirada unilateral de la realidad. No niego que la realidad tenga también un factor político, pero, desde luego me parece que es excesivo ese juicio de la realidad desde ese único prisma", ha destacado.
En este sentido, ha defendido que el nombramiento de obispos por parte del Papa tiene "otros criterios" como son los pastorales, puesto que el hecho de que la Iglesia católica tenga su sede en Roma "le da mucha libertad" ante "los condicionamientos políticos de cada lugar".
Sobre los casos de pederastia, ha destacado que son "una llamada a la conversión interior" y que Benedicto XVI ha dado "una lección auténtica" de un hombre "sin miedo a la verdad".
ICETA
Munilla también se ha referido al "hermoso" acontecimiento que vivirá la Iglesia vasca el lunes, con la ordenación de Mario Iceta como obispo titular de la Diócesis de Bilbao, al que le desea "lo mejor" en su labor.
Asimismo, ha recordado que los obispos vascos tienen "una tradición de trabajar en común" que pretenden mantener en los próximos años en Euskadi.
