SANTIAGO DE COMPOSTELA, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
El sindicato CIG ha acusado a la Xunta de llevar a cabo el "deterioro consciente" de la imagen de los cuerpos de prevención y extinción de incendios mediante la prensa mediática y la "degradación" de las condiciones de trabajo, para "poner a la opinión pública en contra" y facilitar la "privatización" de estos servicios.
El secretario xeral de la central sindical, Fernando García, ha denunciado este miércoles en rueda de prensa que los "pasos hacia la privatización" ya comenzaron al principio de la campaña con el intento de "amortizar 150 puestos del servicio de prevención", y que ahora se intenta "dar la imagen de que este servicio no sirve", lo cual ha juzgado "radicalmente falso".
Para Fernando García, la Administración autonómica quiere dejar el servicio de prevención en manos de los clústers de la madera, previo deterioro de las condiciones laborales y de su imagen pública mediante la contratación de personal por parte de Seaga y las "declaraciones encubiertas" a medios de comunicación --en referencia a un artículo publicado este fin de semana en un diario digital--.
En este sentido, ha rechazado las críticas sobre la falta de experiencia y formación del personal de lucha contra el fuego, y ha añadido que reclaman a la Xunta una mayor formación y que ésta no se les ofrece. De hecho, ha explicado que es el sindicato el que imparte cursos de este tipo destinados a los profesionales del sector.
CONTRATACIONES TEMPORALES
En cuanto a las contrataciones temporales de la empresa pública Seaga, que la CIG ha cifrado en el 90 por ciento de las que se producen en verano, ha insistido en que es "lamentable que se meta a todos en el mismo saco", en especial en cuanto a la formación que se les requiere para acceder a dicho empleo.
Por su parte, la responsable sindical en Lugo, Azucena Gavín, ha criticado que las "instancias superiores" los critiquen cuando "ellas no hacen su trabajo". En concreto, ha censurado la existencia de brigadas sin capataces, bajas que no se cubren, y la ausencia de una previsión de trabajo para todo el año, situaciones de las que ha responsabilizado a la Administración.
"Sólo cuando llueve, cuando no somos tan imprescindibles, empieza el desprestigio", ha declarado. En este sentido, ha asegurado que las brigadas llevan años reclamando reuniones con Medio Rural para establecer una previsión anual que les permita "saber siempre qué hacer", y que, por el momento, las conversaciones han sido "mínimas o nulas".
CONVENIO
Además, ha señalado que los sindicatos piden para este sector "un convenio como el resto de personal de la Xunta", y se niegan a que, tras atravesar con éxito unas oposiciones, "ahora digan que no sirven".
En la rueda de prensa también ha intervenido Daniel Veiga, delegado de prevención de riesgos, quien ha señalado que sus denuncias a la Inspección de Trabajo no han dado ningún fruto. A este respecto, ha denunciado que, a pesar de que miembros de las brigadas deben intervenir en la elección de la indumentaria ignífuga, no ha sido así.
Como consecuencia, Veiga ha afirmado que la "ropa no sirve a nadie", las camisetas "no entran por la cabeza", no se les proporcionan linternas, y que, de los tres tipos de gafas que se les facilitan, sólo unas son reglamentarias. Todo ello redunda, según el delegado de prevención, en muertes como las de los dos brigadistas de Seaga que fallecieron el pasado verano.
En cuanto al artículo que originó la polémica, los miembros de la central sindical han afirmado no haber recibido ningún tipo de respuesta por parte de Medio Rural, aparte de las declaraciones del titular del departamento, Samuel Juárez, resaltando la labor de las brigadas, "cosa que era de esperar".
Sin embargo, según han opinado, sus palabras no coinciden con el "procedimiento constante" de la Consellería. "No queremos declaraciones, sino un trabajo claro", ha sentenciado Fernando García.