KUWAIT 15 Ene. (Reuters/EP) -
Los países occidentales y árabes reunidos en Kuwait para discutir los compromisos de ayuda con Siria han prometido el desembolso adicional de 2.400 millones de dólares (unos 1.760 millones de euros) para aliviar la situación de los cientos de miles de personas que han sufrido en sus carnes las consecuencias de tres años de guerra.
El compromiso viene a paliar las necesidades ya planteadas por la ONU, que reclamó para 2014 un total de 6.500 millones de dólares (unos 4.800 millones de euros). Sin embargo, el año pasado los donantes también prometieron 1.500 millones de dólares (1.100 millones de euros) de los que sólo el 70 por ciento terminaron llegando a Naciones Unidas.
El secretario general de la organización internacional, Ban Ki Moon, ha cifrado en 2.400 millones de dólares los compromisos adquiridos en la cumbre de Kuwait. El anfitrión ha asumido la entrega de 500 millones de dólares, mientras que Estados Unidos ha anunciado una contribución de 380 millones.
Qatar y Arabia Saudí han prometido entregar, cada uno, 60 millones de dólares, mientras que la Unión Europea donará un total de 225 millones. De forma particular, Reino Unido aportará a la ONU 165 millones de dólares para ayudar a la población afectada por la guerra civil en Siria.
La secretaria general adjunta de la ONU para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos, ha denunciado que tanto el régimen de Bashar al Assad como los combatientes rebeldes han demostrado una "completa falta de respeto por las responsabilidades" que, en teoría, debería asumir conforme a las leyes internacionales.
"Niños, mujeres y hombres están atrapados, hambrientos, enfermos, sin esperanza", ha relatado Amos ante los 69 países que han asistido a la conferencia de donantes de Kuwait.
Por su parte, Ban ha advertido de que, "en las mejores circunstancias", el conflicto ha hecho retroceder a Siria "años o incluso décadas". El secretario de la ONU se ha mostrado "especialmente preocupado" por la violencia ejercida contra las mujeres para "denigrar y deshumanizar" a la parte contraria y ha pedido el fin "inmediato" de los abusos.
Las dos partes enfrentadas participarán el próximo 22 de enero en la cumbre de paz de Ginebra, en la que volverá a plantearse una solución política al conflicto. Ban ha reiterado la importancia de establecer un organismo "de transición" y "con plenos poderes ejecutivos" para avanzar hacia la paz.