BRUSELAS, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Administración estadounidense de Donald Trump ha reclamado a los aliados que contribuyan con fuerzas especiales para llevar a cabo operaciones antiterroristas en el noreste de Siria y apoyo logístico.
"Nunca hemos pedido a nadie que contribuya con una presencia militar para patrullar o proteger o trabajar con los turcos en la zona segura. (*) Lo que buscamos son fuerzas militares para hacer misiones contra Estados Islámico que nuestras fuerzas están haciendo en la actualidad en el noreste de Siria", ha explicado el representante de Estados Unidos ante la coalición global contra Estado Islámico y enviado especial del país para Siria, James Jeffrey, en un encuentro con la prensa en la OTAN.
El estadounidense ha insistido en que Washington espera que aporten "fuerzas para llevar a cabo operaciones contra Estado Islámico" y "apoyar logísticamente" las operaciones, como han hecho en Irak. "Estamos intentando conseguir que hagan esto", ha subrayado.
La OTAN ha acogido este jueves una reunión de la coalición internacional contra Estado Islámico convocada por el jefe del Pentágono en funciones, Mark Esper.
Jeffrey, que se reunirá este viernes con la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, también ha avanzado que espera que la Unión aporte "ayuda humanitaria" y "ayuda a aceptar de vuelta" a sus combatientes extranjeros de Estado Islámico capturados.
"Si se escapan, muchos de ellos son peligrosos y estamos de acuerdo con los europeos en que matarán a gente. (...) Hay que impedir que maten a gente y la mejor forma de ello es traerles de vuelta a Europa y que sean juzgados en sus países respectivos", ha remachado, insistiendo en que es lo que está haciendo Estados Unidos.
Pese a que la campaña para acabar con el 'califato' "ha sido muy bien", Jeffrey ha avisado de que todavía "queda una presencia terrorista considerable en Irak, en el noreste de Siria y en otras zonas de Siria".
Respecto a la zona segura que Estados Unidos y Turquía han acordado crear en el noreste de Siria, de cara a retirar a las fuerzas kurdas sirias de las Unidades de Protección Popular (YPG), a las que Ankara considera un grupo terrorista vinculado al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), ha dejado claro que todavía no han acordado los detalles y las condiciones, entre otros la superficie que tendría y el papel que asumiría Estados Unidos.
Por otra parte, ha lamentado que el régimen sirio todavía piense que puede haber una solución miliar al conflicto sirio y ha insistido en la urgencia de buscar una salida a través de la ONU.
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