WASHINGTON, 30 Abr. (Reuters/EP) -
La operación estadoundiense contra el Estado Islámico en Irak y Siria, denominada Operación Resolución Inherente, ha reconocido este domingo la muerte de 352 civiles en los bombardeos desde que se iniciaron estas acciones, en 2014.
Este balance está muy por debajo del recuento que elaboran grupos de Derechos Humanos independientes como Airwars, que en el mismo periodo asegura que se han producido más de 3.000 muertes de civiles en ataques de la coalición.
La evaluación mensual de víctimas civiles de la Operación Resolución Inherente ha publicado estos datos que incluyen 42 casos de muertes de civiles que aún están siendo investigadas.
Además, explica que entre noviembre de 2016 y marzo de 2017 han muerto 45 civiles, mientras que entre agosto de 2014 y la fecha actual incluye 80 nuevos casos de civiles muertos de los que no se había informado hasta ahora. El informe incluye 26 muertes solo de tres ataques de marzo.
En el nuevo balance están también los 14 civiles muertos en un ataque en marzo que provocó una explosión secundaria y los diez civiles fallecidos en un ataque contra un centro de mando del Estado Islámico también en marzo.
"Lamentamos la pérdida no intencionada de vidas civiles (...) y expresamos nuestras más sinceras condolencias a las familias y demás afectados por estos ataques", ha señalado el Pentágono en un comunicado.
En verano de 2014, Estados Unidos, acompañado por más de 60 países, inició una campaña de ataques aéreos contra el Estado Islámico en Irak y Siria. Desde entonces, ha realizado más de 17.000 en Irak y más de 6.000 en Siria, de acuerdo con datos del Pentágono.
