MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de expertos de Naciones Unidas en Derechos Humanos ha reclamado este jueves al Gobierno de Arabia Saudí que detenga la ejecución de un poeta palestino condenado por apostasía, tras apuntarse que podría ser ajusticiado a mediados de mes.
Ashraf Fayad, de 35 años de edad, ha sido condenado por el delito de apostasía, que el autor ha negado categóricamente mientras sus amigos y allegados denuncian que se trata de una venganza de la Policía religiosa saudí por relatar en su libro de poesía 'Instrucciones en el interior' (2008) sus experiencias como refugiado y grabar actos violentos perpetrados por las autoridades.
El relator especial sobre ejecuciones extrajudiciales o arbitrarias, Christof Heyns, ha afirmado que el poeta fue condenado por ejercer su derecho a la libertad de expresión, recalcando que una decisión así es "deplorable".
En esta línea se ha expresado el relator sobre libertad de expresión, David Kaye, quien ha recalcado que "una respuesta tan violenta ante una forma legítima de opinión y expresión tiene como efecto provocar temor en toda la sociedad saudí".
Entre los firmantes del comunicado también se cuentan los relatores especiales sobre los derechos culturales, sobre la tortura, sobre los defensores de los Derechos Humanos y sobre la independencia de los jueces.
Fayad fue detenido por primera vez por la Policía religiosa saudí en agosto de 2013 en la ciudad de Abha (suroeste del país) por insultar a Dios y al Profeta, así como de distribuir un libro de poemas que "incitaba al ateísmo". Sus amigos creen que fue detenido por grabar a la Policía religiosa mientras daban de latigazos a un hombre de esa ciudad.
Cinco meses después, en enero de 2014, Fayad volvió a ser arrestado y el tribunal le condenó a 800 latigazos y cuatro años de prisión. El escritor decidió apelar esta sentencia y, en respuesta, otro juez le condenó a muerte hace tres días al término de un proceso en el que Fayad no contó con representación legal porque las autoridades le quitaron su identificación al detenerle.
"Me han acusado de ateísmo y de extender pensamientos destructivos por la sociedad", lamentó Fayad. Sus amigos denuncian que, cuando la Policía religiosa fue incapaz de demostrar sus acusaciones en un primer momento, comenzaron a increpar al escritor por fumar y llevar el pelo corto. Después, dos "agentes" declararon en el juicio que el autor había insultado a Dios en público.
Fayad negó estas acusaciones inmediatamente ante el juez. "Me arrepiento ante Dios altísimo y soy inocente de lo que ha ha aparecido en mi libro mencionado en este caso. 'Instrucciones en el interior' es un libro sobre mi persona, como refugiado palestino, y sobre asuntos culturales y filosóficos", lamentó.
Arabia Saudí ha ejecutado a más de 150 personas en 2015, lo que según Amnistía Internacional (AI) es la cifra más elevada en el país desde 1995. La mayoría de las ejecuciones son llevadas a cabo por decapitación, a veces en público.