NUEVA YORK, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente francés, François Hollande, ha asegurado que en los bombardeos realizados este domingo por aviones de su país sobre Siria han servido para destruir una base de entrenamiento del Estado Islámico que suponía una amenaza para la seguridad de Francia. Los bombardeos seguirán en las próximas semanas.
"Francia ha bombardeado un campamento de entrenamiento de este grupo terrorista, Daesh (Estado Islámico), que amenazaba la seguridad de nuestro país", ha asegurado Hollande desde Nueva York, donde se encuentra para asistir a la sesión plenaria anual de la Asamblea General de la ONU. "Nuestras fuerzas han logrado su objetivo", ha apostillado.
El bombardeo ha sido en un pueblo situado cerca de la ciudad de Deir al Zor, en el este de Siria. Seis aviones, cinco de ellos Rafale, han protagonizado el ataque, que se ha producido en torno a las 6.30 horas de esta mañana.
En cuanto a los datos del lugar bombardeado, Hollande ha reconocido que la información procedía de la coalición internacional contra el Estado Islámico liderada por Estados Unidos, de la que Francia formaba parte hasta ahora solo para intervenciones en Irak.
"Los objetivos fueron identificados a través de vuelos de reconocimiento y también gracias a la coalición que también nos proporcionó la información", ha indicado.
Hollande ha asegurado que la operación se ha saldado "sin consecuencias para la población civil" y ha anunciado que "en las próximas semanas pueden tener lugar otros bombardeos, si es necesario".
En cuanto al futuro político de Siria, Hollande ha abogado por una transición para superar al régimen del presidente Bashar al Assad, aunque ha dejado la puerta abierta a negociar con él. "Francia no excluye a nadie, pero el futuro no pasa por Al Assad", ha concluido.
