AMSTERDAM, 28 Ene. (Reuters/EP) -
Países Bajos ha rechazado este lunes la petición de Italia de acoger a los 47 migrantes rescatados por un barco de la ONG alemana Sea-Watch y que se encuentran bloqueados en un puerto italiano, argumentando que hay que distinguir entre refugiados reales e inmigrantes económicos.
El 'Sea-Watch 3', operado por una ONG alemana pero de bandera holandesa, rescató a los migrantes de una embarcación hinchable frente a la costa de Libia el pasado 19 de enero y desde el viernes se encuentran en aguas italianas para protegerse de la mala situación de la mar, con olas de hasta 7 metros.
El viceprimer ministro italiano, Luigi Di Maio, líder del Movimiento 5 Estrellas, ha sostenido que el barco debería dirigirse a Francia, que le ha acusado de no cumplir con sus responsabilidades, o a Países Bajos.
El Ministerio de Justicia y Seguridad, que supervisa la política migratoria en Países Bajos, ha dicho este lunes que no aceptará a ningún migrante del Sea-Watch hasta que haya un acuerdo a largo plazo sobre cómo diferenciar a refugiados de inmigrantes económicos.
"Aquellos que no tienen derecho a protección internacional tienen que ser enviados de vuelta de forma inmediata a su llegada a las fronteras europeas", ha defendido el Ministerio holandés. "Sin una perspectiva clara para tal solución estructural, Países Bajos no participará en medidas ad hoc para el desembarco", ha recalcado.
Esta es la segunda vez en un mes que el barco de Sea Watch se ve varado en el mar con migrantes rescatados a bordo y sin un puerto seguro. La última vez se resolvió después de 19 días y un acuerdo entre 8 países de la UE, incluida Italia, para el reparto de los migrantes rescatados.
Países Bajos, que acogió a miles de migrantes en los años 1960 y 1970 para trabajar en el país, ha adoptado una de las políticas migratorias más duras de la UE tras la reacción negativa de la población.
LA FICR CRITICA LA SITUACIÓN
Entretanto, el presidente de la Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR), Francesco Rocca, ha denunciado que "incluso en tiempos de guerra los náufragos está protegidos gracias a las Convenciones de Ginebra". Sin embargo, pese a que "no hay ninguna guerra en el Mediterráneo y la UE está en paz", "nadie está protegiendo las vidas de las personas que huyen de la tortura y la violación en Libia", ha criticado.
Rocca ha planteado sus dudas de que los 47 rescatados puedan plantear "una amenaza al conjunto de la UE" y ha sostenido que "salvar vidas debe ser la prioridad de todos los gobiernos".
En este sentido, el presidente de la FICR ha reclamado a "todos los gobiernos europeos que encuentren una solución duradera que evite nuevas muertes en el Mediterráneo". En el caso de Italia, ha reclamado al Gobierno de coalición que permita atracar al barco de Sea-Watch y el desembarco de las personas a bordo. "Son seres humanos, no números", ha recalcado.
