Un ejecutivo chino advierte del fracaso de gigantes mediáticos por el control gubernamental

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Actualizado: miércoles, 3 febrero 2010 15:11


PEKIN, 3 Feb. (Reuters/EP) -

China nunca será escuchada en el escenario internacional si el Gobierno no reduce su estrecho control de los medios de comunicación y la industria cinematográfica, dijo el miércoles el presidente ejecutivo del segundo mayor portal de internet del país.

Charles Zhang, el locuaz presidente ejecutivo de Sohu.com, dijo en un foro de Pekín que los planes de crear gigantes mediáticos chinos a nivel mundial iban camino a fracasar si el Gobierno no relajaba los controles.

"Los periódicos chinos y las cadenas de televisión carecen completamente de competitividad significativa y no tienen personalidad independiente (...) así que no tienen autoridad o respeto", dijo Zhang, según una transcripción del discurso que fue publicado en la página web de la compañía.

"Si el Wall Street Journal o el New York Times informan algo, el mundo entero presta atención, y lo cree", añadió. "El derecho de China a hablar en el mundo es totalmente deficiente porque no tiene organizaciones mediáticas que puedan ganarse el respeto", agregó.

China ha tratado de que su voz se escuche más globalmente sobre todo a través del canal en inglés CCTV-9, pero no ha tenido mucho éxito a pesar del dinero que ha invertido en el proyecto.

El gobernante Partido Comunista ha dictado una mezcla de reformas comerciales y control estatal y censura para los sectores de los medios de comunicación y editoriales, al tiempo que dibuja una línea roja que no puede cruzarse sobre temas que directamente amenazaban políticas clave.

China también quiere aprovechar la fuerza comercial para crear medios de comunicación que puedan proyectar las ideas y valores de China a un público nuevo y un mundo más amplio.

Zhang dijo que estas reformas tenían el riesgo de crear compañías mediáticas sin competitividad, "una cabeza de tigre con cola de serpiente", una expresión china que se refiere a empezar bien pero terminar mal.