El cargador del móvil y el pijama, los objetos "más olvidados" en NH Hoteles

Hotel NH
CEDIDA
Actualizado: lunes, 12 septiembre 2011 16:26

MADRID, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -

El cargador del móvil, el pijama y la ropa interior, el libro de cabecera, el pasaporte, y las 'delicatessen' de la gastronomía regional conforman el 'top cinco' de los objetos olvidados por los usuarios de NH Hoteles.

Según una encuesta llevada a cabo por la cadena hotelera entre sus directores sobre los descuidos registrados en un centenar de establecimientos nacionales e internacionales, en uno de cada diez viajes los huéspedes olvidan su cargador de móvil "enchufado en alguna esquina de la habitación".

Entre los lugares más comunes de estos hallazgos se encuentran el armario, bajo la cama y entre las sábanas, el baño, la mesilla de noche y la terraza, "donde los usuarios se suelen dejar los trajes de baño y las chanclas", en el caso de los hoteles de costa.

Más allá de estos descuidos comunes, los hoteles albergan historias de abandonos "más que curiosos", como prótesis dentales, el disfraz de gogó hallado en un hotel italiano, la ropa interior de una celebérrima cantante española o un anillo de pedida.

Las camareras de piso de NH han llegado a encontrar incluso una silla de ruedas, una colección de pelucas, un perro, una pierna ortopédica, una alfombra persa de cuatro metros, un oso panda de peluche de 1,80 metros y 100.000 euros encontrados en la caja fuerte de un hotel español. En muchos casos, los objetos nunca llegaron a reclamarse.

EL 'LIBRO DE OLVIDOS'.

La cadena recuerda que dispone de un 'registro de olvidos' para quienes sí deseen recuperar sus enseres, por el cual cada objeto encontrado se anota detalladamente en un libro.

Por norma general, el hotel no contacta con el cliente por motivos de privacidad y se espera a que el huésped reclame el olvido durante un año en España y alrededor de seis meses en otros países.

Si al cabo de ese período no es requerido, se cede a la camarera que lo encontró o se dona a instituciones benéficas, dependiendo de su valor y según el criterio del director del establecimiento.