Viajaban dos o tres veces al mes al sur de España y transportaban unos 500 kilos cada vez
BARCELONA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional han desarticulado una organización de narcotraficantes que introducía hachís procedente de Marruecos desde el sur de España hasta Cataluña en viajes en coches de gran cilindrada a 200 kilómetros por hora y con matrículas falsas.
En rueda de prensa, el inspector jefe del Área Central de Crimen Organizado de los Mossos, Quim Francès, ha explicado que han sido detenidas 19 personas, algunas con antecedentes, que hacían de dos a tres viajes al mes con entre 500 y 600 kilos de hachís metidos en el coche con poco disimulo, en el maletero y los asientos traseros.
Según Francès, se trata de la organización dedicada al tráfico de hachís "más importante afincada en Cataluña" y funcionaba como una empresa, bien estructurada, que revendía el hachís a bandas de Francia e Italia aprovechando que el precio del hachís allí es el doble que en España, donde el kilo cuesta unos 2.000 euros.
En la operación conjunta, que empezó hace seis meses y ha estado dirigida por el Juzgado de Instrucción 7 de El Vendrell, se registraron simultáneamente el 19 de marzo un total de 18 domicilios en Santa Coloma de Gramenet, Badalona, Cerdanyola del Vallès, Terrassa, Gualba, Roses, Palau Savardera, Rubí y Marbella (Málaga) y se realizaron 12 de las detenciones.
En total, la policía se ha incautado de 3.457 kilos de estupefaciente en varias actuaciones contra este grupo, una de ellas el 23 de octubre cuando localizaron 490 kilos en una casa de Palau Savardera (Girona) y otra en La Jonquera, donde se incautaron de 490 kilos y detuvieron a cuatro personas.
VIAJE EN 13 HORAS
El inspector jefe del Grupo IV de Estupefacientes de la Policía Nacional, José María Párraga, ha explicado que la organización hacia el viaje de ida y vuelta entre Algeciras (Cádiz) y otros municipios del sur de España hasta Cataluña en 13 horas, y se servía de un coche vigía que iba delante "que estaba atento a los controles policiales".
Los viajes siempre se hacían de noche y burlaban los radares gracias a las placas de matrículas dobladas o falsas, una vez se había cargado el hachís que llegaba a Algeciras o Málaga procedente de Marruecos, y que, según Párraga, suele llegar a España en lanchas semirrígidas o barcos pesqueros.
El grupo, que estaba afincado en Cataluña desde hacia años, tenía una "alta movilidad" y compraba vehículos de más de 50.000 euros, aunque no tenía un elevado tren de vida aparente porque todo el dinero que ganaba lo invertían en Marruecos, de donde son originarios la mayoría de arrestados, ha informado Francès.
La investigación arranca el 14 de junio después de que la Policía Local de L'Arboç (Tarragona) interceptara un alijo de 615 kilos de hachís a este grupo en un vehículo en el área de servicio de Sant Jaume de Domenys de la autopista AP-7, al pincharse una rueda y que los ocupantes huyeran de los agentes, aunque finalmente fueron identificados.
Esta información se cruzó con la que tenía la Policía Nacional, que en agosto recibió el aviso de la policía francesa de que un grupo estaba introduciendo por carretera grandes cantidades de hachís, y tras identificarles se descubrió que estaban afincadas en el Alt Empordà (Girona) y pudieron interceptar uno de sus transportes con 980 kilos en Martorell (Barcelona).
