Carod inaugura la delegación catalana en Nueva York con un "Yes we can" ante 200 invitados

Actualizado: viernes, 23 enero 2009 11:03


NUEVA YORK, 23 Ene. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Jordi Fernández) -

El vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, cerró ayer su discurso de inauguración oficial de la delegación del Govern en Nueva York con un "Yes, we can. Long live to Catalonia" ("Sí, podemos. Larga vida a Catalunya"), para mostrar el empeño de Catalunya por estar en el mundo, y parafraseando al nuevo presidente estadounidense, Barack Obama.

La apertura de la cuarta delegación catalana en el extranjero reunió a unas 200 personas, incluidas el cónsul español, representantes de varias embajadas y de la delegación vasca en la ciudad. Carod estuvo arropado por el ex presidente de la Generalitat por el PSC Pasqual Maragall y el ex presidente del Parlament Joan Rigol (CiU), además del cónsul, Ferran Villalonga.

Carod agradeció la presencia de Maragall y Rigol, que así "refuerzan y honran" la delegación, y la de Villalonga. Además, destacó la asistencia de representantes diplomáticos de varios países, y citó especialmente a Andorra y Québec.

El acto empezó con las imágenes del discurso del músico Pau Casals ante la Onu en 1963, cuando destacó la precocidad catalana en el parlamentarismo --incluso antes que Gran Bretaña--, las asambleas medievales catalanas de Paz y Tregua --que impulsó el Abad Oliba-- y la condición de nación de Catalunya dentro de España.

Maragall dijo que ese discurso representa la "eternidad" catalana, porque viene de muy lejos y, a la vez, los efectos de lo que dijo durarán mucho. Aprovechó para recordar que su relación con Carod empezó en Tarragona --cerca de donde vivía Casals cuando antes de exiliarse--, y donde se dieron "los primeros pasos que permitieron que Catalunya cambiara de gobierno".

"No estaríamos aquí si no fuera por el Estatut y por la valentía del vicepresidente", dijo a propósito del Estatut y de la voluntad de Carod de aplicarlo con iniciativas como las oficinas en el extranjero.

Carod afirmó que el Estatut da cobertura legal a Catalunya para abrir delegaciones "desacomplejadamente y cumpliendo una ley orgánica". "Nuestro mundo es el mundo, decía un antiguo presidente catalán, Jordi Pujol", alegó para defender las delegaciones. Además, consideró un error que Catalunya se cerrara al extranjero y que se limitara a circunscribirse en España. "No vamos a competir con ninguna embajada ni consulado", matizó.

El vicepresidente agradeció el trabajo de la viceconsellera de Exteriores, Roser Clavell, por la red de delegaciones catalanas en el extranjero, y lamentó que haya quien se sienta "molesto".

Joan Rigol explicó que "un pequeño secreto" de los catalanes es que han sobrevivido a fuerza de abrirse. Como ejemplo, dijo que, "al perder la personalidad jurídica políticamente hablando" tras la Guerra de Sucesión en 1716, el pueblo siguió adelante "con toda su fuerza" y progresó, hasta hoy.

Además, constató la "voluntad de ser" de los catalanes, siendo "fieles a la catalanidad; a veces, partiendo de bajo cero en 1716 y en 1939, tras la Guerra Civil, cuando Catalunya estaba "entre el exilio y las catacumbas".