MADRID, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Superior de Deportes (CSD) ha aclarado que los 15 millones que le reclama el Comité Organizador de los Juegos Mediterráneos de Tarragona 2017 estaban sujetos a la disponibilidad de los presupuestos del Estado y que ni tan siquiera existe un protocolo que le obligue a ello, indica en una nota de prensa.
El presidente del CSD, Miguel Cardenal, ha recibido este martes al diputado por la circunscripción de Tarragona, Alejandro Fernández, para dialogar sobre la financiación de los Juegos del Mediterráneo, después de que el alcalde de la localidad catalana, Josep Félix Ballesteros, se reuniera con el resto de ediles de las sedes y reclamara al Ejecutivo que incluya una partida para Tarragona 2017 en los Presupuestos de 2016.
En este sentido, el Consejo señaló que el "compromiso de financiación" que reclama el Ayuntamiento de 15 millones "lo ha determinado el propio Ayuntamiento, con la única base del respaldo otorgado por España a la candidatura de Tarragona".
"Durante esta legislatura se han celebrado en estos años los Campeonatos del Mundo de Vela Clases Olímpicas, Balonmano, Baloncesto, Natación, Tiro Olímpico, Ciclismo, la Universiada de Granada ...
Muchos de los alcaldes tenían compromisos firmados por el Consejo Superior de Deportes, la mayoría la semana anterior a la disolución de las Cortes acordada por el Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero, que ya sabía que no sería su Gobierno quien respondería de lo que firmaba. No se ha hecho frente a esos protocolos, porque estaban sujetos a una disponibilidad presupuestaria que no ha existido. Tarragona incluso carece de un compromiso de esa naturaleza", explicó.
Asimismo, recordó que el Ayuntamiento firmó en 2013 un protocolo con el CSD "que se ha cumplido escrupulosamente, en el que no se reclamó ninguna financiación, lo que carecería de cualquier sentido si efectivamente existiera ese compromiso".
"Todos los campeonatos citados se han realizado sin financiación de los Presupuestos Generales del Estado, aunque beneficiándose de las extraordinarias exenciones fiscales de que disfrutan los Juegos del Mediterráneo. Esas desgravaciones, frente a lo afirmado por algunos responsables políticos los últimos días, son del 90%, cargan íntegramente contra la recaudación del Estado, y han permitido recaudar un número importante de millones de euros. Tarragona ha gozado de una excepción para disponer de un año más de esta medida", añadió.
Para el CSD, el agravio no es la comparación entre Tarragona y los Juegos de Almería en 2008 sino sería "la comparación entre Tarragona y todos esos eventos que se han celebrado en la misma época, en los años de esta legislatura".
"Respecto de declaraciones efectuadas por el Gobierno antes de 2010, no puede compartirse que se ignore completamente el dramático escenario creado por la crisis económica que ha afectado a nuestro país, y que todos hemos debido aceptar estos años", indicó.
El CSD aseguró que "siempre ha querido trabajar" con Tarragona. "No obstante, la última vez que el alcalde vino a tratar de este tema, se fue aduciendo que llevaba mucho tiempo en la sala de espera, y todas las decisiones adoptadas por el Comité organizador lo han sido al margen del CSD, e incluso contra su criterio. El CSD nunca ha dejado de tener su mano tendida hacia Tarragona. El CSD no entiende razonable que se considere que es el Ayuntamiento, sin más, a quien le corresponde decidir qué aportación ha de realizar el Estado y cómo se debe gastar. Es un planteamiento inaudito, desconocido respecto del resto de grandes eventos deportivos que ha acogido España durante esta legislatura", prosiguió.
El CSD expresó su deseo por que los Juegos del Mediterráneo "sean un éxito", y "se hace cargo de la extraordinaria importancia" que tienen para Tarragona, Catalunya y España, "y persiste en su actitud de colaborar en su organización, en la medida en la que el Comité Organizador lo desee y permita, y en la que la situación económica de nuestro país lo haga posible".
Por ello, Miguel Cardenal viajará a Tarragona este jueves para entrevistarse con el alcalde de la ciudad y con los de las subsedes para intercambiar impresiones y "reanudar la relación normal y fluida que es lógica ante un reto de esta envergadura".
"En este sentido, se invitará a los organizadores a tratar sobre su planificación, buscar la mejor manera de hacerla sostenible y adecuada a los tiempos actuales, recuperando el tiempo perdido, y ofrecer todo el soporte -también en su caso, el financiero-, buscando el necesario punto de equilibrio entre el deseo de hacer los mejores juegos con el legado más amplio para Tarragona, y al tiempo ser sostenibles en la actual situación económica de nuestro país", concluyó.
