MADRID, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
RAIS Fundación ha impulsado en España 'Housing First', un modelo que "puede convertirse en una solución para erradicar el sinhogarismo de calle", ya que, según asegura la entidad, este modelo está "orientado a resultados" y es "eficaz, eficiente, sostenible e innovador".
La fundación implantó este modelo por primera vez en España gracias al programa 'Hábitat', que puso en marcha en 2014. Este programa ofrece una vivienda individual propia y con carácter de continuidad a personas que actualmente están viviendo en la calle. Un equipo de profesionales presta a cada persona un apoyo no condicionado a la consecución de objetivos ni a otras exigencias habituales en los procesos de intervención social, como son el seguimiento de tratamientos médicos o mentales, o la abstinencia, entre otros.
La iniciativa está dirigida a aquellas personas que, por la complejidad de su proceso de exclusión, suelen quedar fuera de los sistemas tradicionales de atención, viven de modo estable en las calles y sufren problemas de salud mental, discapacidad y adicciones.
En él participan 100 personas sin hogar divididas en dos grupos: el grupo participante en el programa 'Hábitat' y otro que recibe la intervención tradicional. Las 100 personas comparten un mismo perfil: un promedio de edad de 48 años, llevan de media nueve años durmiendo en la calle y presentan problemas de salud mental, una adicción activa y/o una discapacidad. El 82% de las personas participantes son hombres y el 18% mujeres.
CONCLUSIONES
Las conclusiones del programa 'Hábitat' se han presentado este viernes en el espacio CaixaForum de Madrid en la 'Jornada Internacional Hábitat. Impulsando el desarrollo del modelo Housing First en España'.
La principal conclusión que ha extraído la entidad es que el modelo 'Housing First' tiene un coste "similar o menor que el de otro tipo de recursos de la red de personas sin hogar" y que logra "una intervención de mayor intensidad y más efectiva".
Concretamente, este resultado determina que las personas participantes en el programa disminuyen el uso de recursos sociales de emergencia y necesidades básicas, como equipos de calle o centros de día, así como aumentan el uso de recursos de rehabilitación y reinserción, como talleres formativos, atención psicológica o psiquiátrica y rehabilitación, entre otros.
Además de su bajo coste y su efectividad, destaca la estabilidad en el alojamiento. Precisamente, el 100% de las personas participantes en 'Hábitat' han pasado de vivir establemente en la calle a permanecer, un año después de su entrada, en la vivienda que les facilita el programa.
Por otra parte, la entidad ha concluido que la calidad de vida de las personas participantes, teniendo en cuenta el índice QoLI, así como su sensación de seguridad, han aumentado notablemente. Asimismo, estas personas sufren menos agresiones, insultos y vejaciones y muchas de ellas han recuperado las relaciones familiares y han disminuido su sensación de soledad. En cuanto a la salud, destacan las mejoras con respecto a síntomas frecuentes en las personas sin hogar como la ansiedad y el insomnio.
