Actualizado 02/06/2015 13:54

Científicos piden protección para ecosistemas marinos de profundidad

Coral Blanco de profundidad del Mediterráneo
OCEANA

MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

El coordinador de Deep Sea Conservation Coalition, Alex Bartolí, ha pedido a los Estados miembro de la Unión Europea (UE) y especialmente a España que concluyan las negociaciones para un nuevo reglamento que garantice la sostenibilidad de la pesca y una protección eficaz de los ecosistemas marinos vulnerables en aguas profundas.

Así lo ha reclamado en el marco de una reunión de científicos internacionales que se celebra este martes en Barcelona con representantes de Deep Sea Conservatio Coalition (DSCC) para analizar los impactos de las artes de pesca en aguas profundas y buscar posibles soluciones para minimizarlos en aras de una mejor conservación de estos ecosistemas.

La jornada 'Pesca de Aguas Profundas: Impactos y Soluciones' se celebra en el marco de las negociaciones del Cosejo de Ministors de la Unión Europea para la reforma del Reglamento Europeo para la pesca en aguas profundad en el Atlántico nororiental que está actualmente en vigor.

El científico del Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona, Francesc Sardá ha manifestado que la busqueda de recursos pesqueros en aguas cada vez más profundas es una "señal inequívoca del fracaso de las políticas de gestión pesquera en aguas más someras".

A su juicio, el agravante en la explotación de las zonas profundas es que, si bien son mucho más extensas, también son mucho más vulnerables. La menor energía que llega a las grandes profundidades determina ecosistemas con menor capacidad de resiliencia.

Por ello, afirma que "hay que plantear la pesca profunda bajo el concepto de que la explotación comercial masiva de determinadas especies profundas desequilibra rápidamente las redes tróficas y acaban afectando a las propias especies objetivo que queremos pescar".

En este contexto DSCC señala que la pesca de arrastre en aguas profundas no sólo genera imapactos sobre los ecosistemas marinos vulnerables, sino también modifica la estructura del paisaje submarino y tiene un impacto negativo sobre los sedimentos, y la biodiversidad de los organismos que habitan en ellos, incluyendo su capacidad de secuestrar carbono.

Por su parte, el científico del Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona Pere Puig ha añadido que el calentamiento, la subida del nivel del mar, la acidificación y los cambios en la circulación oceánica se han enumerado como los mayores impactos humanos en los océanos.

"Estudios recientes abogan a favor de la inclusión en la lista la modificación del paisaje submarino por la pesca de arrastre, junto con las consecuencias ecológicas y biogeoquímicas que puedan derivarse de ella", ha subrayado.

En esta línea, el coordinador de DSCC España, Alex Bartolí, ha advertido de que hay "evidencias claras y contundentes" de que los océanos están sufriendo "impactos graves" vinculados a la pesca en aguas profundas, especialmente por el arrastre de fondo en aguas prondas.

Tras la jornada se elaborará un documento que remitirá a la Secretaría General del Mar, encargada de liderar las negociaciones en Bruselas, para contribuir a las discusiones que se están llevando en el Consejo de Ministros.

A la jornada asiste el exeurodiputado de la Comisión de Pesca del Parlamento comunitario Raúl Romeva que considera que "ya va siendo hora" de que se entienda que el mar no es una propiedad privada sino un bien común.

"Tenemos la responsabilidad de gestionarlo pensando en las generaciones futuras. Que no lo veamos, o no lo conozcamos todavía al 100% no quiere decir que nos podamos desentender y hacer cualquier cosa. Debemos sentirnos responsables", ha concluido.