La 'Salomé' de Strauss se pasa a un casino de Las Vegas en el montaje ideado por Robert Carsen para el Teatro Real

Actualizado: sábado, 10 abril 2010 19:00

Dirigida musicalmente por López Cobos, esta ópera es una coproducción con el Teatro Regio de Turín y el Maggio Musicale Fiorentino

MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -

La 'Salomé' de Richard Strauss (1864-1949) se estrena mañana en el Teatro Real de Madrid con una peculiar visión ideada por el director de escena canadiense Robert Carsen que la sitúa en un casino de Las Vegas.

Hasta el 28 de abril estará en cartel esta coproducción con el Teatro Regio de Turín (donde se estrenó en marzo de 2008) y con el Maggio Musicale Fiorentino. Es la primera vez que se presenta esta ópera, "excesiva en todos los aspectos y muy exigente", en la nueva etapa del Teatro Real, según dijo esta semana su director artístico, Antonio Moral, quien recordó el éxito original de esta obra que no se veía en la capital desde hace 15 años.

Robert Carsen, que ha firmado otros proyectos en el Teatro Real como 'Diálogo de Carmelitas' (2006) y 'Katia Kabanova' (2008), vuelve ahora con un montaje "completamente diferente" a estos, según afirmó, y en el que despoja a la joven protagonista de su carga diabólica y perversa, presentándola como "una víctima" del entorno disoluto en el que crece.

En opinión de Carsen, Las Vegas, paradigma del oasis de vicio y lujuria en medio de la nada, constituyen una "comparación muy válida" con la vida licenciosa y desmesurada del palacio de Herodes, en medio del desierto. "He pretendido acercar la historia a nuestra sociedad actual", argumentó.

OBRA MUY 'KITSCH'

Así, la trama de la ópera está situada en la antecámara de una sala acorazada y repleta de riqueza de un casino de Las Vegas. El decorado y los figurines de Radu y Miruna Boruzescu utilizan varios elementos decorativos 'kitsch', de inspiración romana y egipcia para mantener las resonancias bíblicas del drama de Oscar Wilde.

Nina Stemme, que ofreció un concierto en el Teatro Real la pasada temporada, vuelve ahora para asumir el papel protagonista, que interpretó por primera vez el pasado año en el Teatro del Liceu. Estará acompañada por el tenor Gerhard Siegel (Herodes), la mezzosoprano Doris Soffel (Herodias) y el barítono Wolfgang Koch (Jochanaan). Alternará sus actuaciones con Annalena Persson, que encabeza el segundo reparto al lado de Peter Bronder, Irina Mishura y Mark S.Doss.

Carsen recordó los problemas de Wilde en Inglaterra cuando quiso estrenar su 'Salomé', en la que se inspiraría luego Strauss. "Fue un escándalo allá donde se presentaba pero el compositor, con su música, nos muestra otra Salomé, deseosa de amor y compasiva al escuchar la voz de Juan el Bautista", explicó aludiendo también a la partitura "intensa y brillante" y a la importancia central del baile en esta ópera.

IMPULSOR DE LA OPERA DEL XX

Jesús López Cobos, al frente de ambos elencos y de la Orquesta Titular del Teatro Real (Orquesta Sinfónica de Madrid), integrada para la ocasión por 95 músicos, coincidió con Robert Carsen en resaltar la danza como algo "fundamental" en esta ópera y, a la vez, "su punto más débil".

El director musical elogió la "solución genial" ideada por Carsen en la que los velos de Salomé no están en ella sino en siete viejos. "Esto demuestra que lo perverso no se encuentra en Salomé sino en los que miran", señaló.

López Cobos calificó a Strauss con esta obra como "el gran impulsor de la ópera del siglo XX" y aludió a su "rica orquestación" que, por primera vez se presenta tal y como figura en el original. Asimismo, el director musical se refirió a la complejidad que ofrece esta partitura para los cantantes, una ópera que es, sobre todo, "color", como el propio Strauss decía.