MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) -
El director general de la Dirección General de Tráfico (DGT), Pere Navarro, ha reconocido que los detectores de radares son "una cosa nueva, que no encaja perfectamente con la redacción que da la ley sobre los inhibidores" pero, en cualquier caso, ha advertido de que "si no están prohibidos, lo estarán" y, por lo tanto, ha instado a los conductores a "no instalarlos".
En una entrevista a Punto Radio recogida por Europa Press, ha explicado que mientras que los inhibidores permiten bloquear el radar y pasar a 200 kilómetros por hora por la zona vigilada, los detectores de radares limitan su función a advertir de la presencia de éste. De igual forma, ha insistido en que lo van a prohibir y ha señalado que si no lo está ya, es porque se trata de "un tema que ha aparecido con posterioridad a la ley". Asimismo, ha puntualizado que "en estos temas hay mucho negocio detrás".
Respecto a la puesta en marcha de la nueva normativa, Navarro ha afirmado que los conductores pueden estar "más tranquilos" porque ahora "será más difícil que los infractores se escapen" y, por lo tanto, "serán todos iguales ante la ley", lo que supone "una garantía". Además, ha indicado que la nueva normativa es "más sencilla y comprensible", algo necesario ahora que se ha multiplicado el número de conductores en España hasta los 25 millones.
LOS HOMBRES MÁS INFRACTORES
Por otro lado, se ha referido a la reducción de las sanciones por pronto pago que ha comparado con los juicios rápidos, de los que "ha copiado" la idea. De esta forma, "si uno está conforme con la denuncia tiene un descuento del 50 por ciento porque la administración se ahorra mucho papeleo y mucho tiempo".
Por último, Navarro ha afirmado que el permiso por puntos "pone de manifiesto", que son los hombre quienes cometen el mayor número de infracciones. En este sentido, los que pierden puntos son en el 80 por ciento de los casos hombres y en el 20 por ciento restante, mujeres.
Por lo tanto, el director general de la DGT ha asociado estas cifras con la relación psicológica "distinta" que hombres y mujeres tiene con el coche. Así, mientras que para la mujer es "un instrumento, una herramienta como cualquier otra", para el hombre "siempre ha representado algo más".
